Ningún ser humano se sentirá conforme con el amor que recibe, porque las personas tenemos la tendencia a ser inconformistas. Es triste saber que la realidad es esa. La realidad debería ser otra. La cosa debería ser que las personas supieran apreciar cada demostración de amor, por más pequeña que sea, porque en la sutileza se esconde una gran intención para demostrar amor. También existe eso que toda persona odia, pero a pesar de eso a veces hace eso que no le agrada... Eso es el "realismo", o como le digo, "pesimismo".
Ejemplo, una pareja hace la promesa de nunca dejarse, pero a la semana, el chico dice que ella algún día lo dejará y ella dice que él se cansará de ella... O sea, se apegan al "realismo" de una manera tan fuerte, que de esa manera, poco a poco, van a matar su amor. Ese "realismo" no debería existir en ninguna relación, porque si realmente se ama, se confía en la otra persona sin andar pensando que que nos dejarán o que se cansarán de nosotros.
En el amor nada es perfecto. Para vivir el amor a plenitud, hay que sacrificarse bastante. No se debe pensar que el amor anda por ahí listo y empaquetado para que nosotros lo disfrutemos. No, no es así. El amor se construye a base de confianza y con el tiempo se hace fuerte, fuerte y más fuerte, hasta que nada puede acabar con ese amor.
También existe la idea de que el amor siempre habita en nosotros, pero que sólo se hace sentir cuando alguien "lo mueve." Alguien debe "mover" ese amor para poder experimentar el sentimiento de estar enamorado. Si nadie llega a provocar que tu amor se haga sentir, probablemente nunca vayas a sentir la presencia de tu amor.