Difícilmente una persona me deje casi sin palabras como tú lo acabas de hacer. Para mí es inevitable reconocer que mientras leía este hermoso post sentía una conexión inexplicable no sólo con las palabras sino contigo, me pasaba lo mismo que a ti al leer tus publicaciones, me sentía enlazado a tus palabras, pensamientos, gustos, sentires e ideales, pero ese enlace se terminó de materializar el día que te conocí, sobretodo al momento de escuchar tu voz que me cautivó, al ver la vibra que emanaba tu aura, ese positivismo, esa alegría, que haría que cualquier persona quiera estar junto a ti y, cuando supe que amabas los vinos tanto como yo, al punto que entramos juntos a una casa de licores ese día, sentí que tenía frente a mí a mi otra mitad. Eres tan hermosa como tus palabras, si antes estaba cautivado, ahora estoy enamorado. Y si del concurso hablamos, sin duda este post marca la diferencia porque ese amor platónico no se quedó en lo virtual, sino que ha llegado al punto de materializarse en la realidad. Gracias, nos vemos pronto en una velada nocturna. Besos.