Los vecinos de Barrio Villa los Ángeles, especialmente los aledaños a la Av. Rafael Núñez, denunciaron que viven en una zona liberada. El alto volumen de la música de los bares (algunos que incluso funcionan como boliches clandestinos), las agresiones de los clientes que salen alcoholizados y la falta de limpieza son moneda común en el barrio.
Los controles municipales, de acuerdo a los vecinos, son particularmente escasos e ineficientes, dado que sólo regulan la actividad que se puede ver desde afuera, y hacen la vista gorda con las fiestas clandestinas que se realizan puertas adentro.