El juego diario. Domingo 29 de Noviembre de 2020. Vinimos con muchos propósitos.

Sí,es Domingo, día libre de trabajo. Pero como es común, alrededor de las 6 de la mañana ya estaba despierto, activado como con una especie de reloj biológico en metabolismo. Niveles de energía por el cielo literalmente hablando. Lavé a mano mis uniformes antes de que se fuese el agua, barriendo y mopeando cuarto,sala,baño de la casa.

Desayuno lo hizo mi tía con pan que compartí y un revoltillo que ella preparó más un sabroso jugo de parchita. Ya en ése momento,me preparaba mentalmente para lo que venía;el correr en ruta urbana por séptima vez en lo que va de 2020,con el enfocado objetivo de bajar el crono récord actual de una hora,8 minutos y fracción,del quedé a 21 segundos en la prueba pasada.

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El poder mental es ilimitado.

Al salir de casa hacia punto de partida de la prueba física,ya el despejado cielo regalaba un radiante sol, incidiendo por razones obvias en la temperatura. 9:45 a.m. marcaba mi reloj al dar zancada de partida. De forma invariable, inicié con veloz ritmo la ruta,yendo en menos de 5 minutos a una velocidad mantenida sinónimo de tener una buena condición cardiovascular y física en general.

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Rendimiento físico en aumento.

Hoy,durante la prueba,en modo reiterado, viví en primera persona,sintiendo cada zancada en recorrido,la fuerza que producto del entrenar he desarrollado. En algún punto,donde tengo memorizado un parcial, al pasar por allí hice el mismo de 13 y fracción, sintiéndome excelente,con resistencia y potencia en pleno. Al pasar por segundo parcial me sorprendí por estar considerablemente por debajo del promedio y allí ya sabía que iba por un tiempo final sensacional. Y sí,tal tiempo,luego de haber sentido cada paso del camino,se manifestó en el cronometro de mi reloj Casio(con el el que tengo 11 años desde que en un Agosto me lo regalé por mí cumpleaños) el tiempo de 1'02'55"91. Hablo de más de 5 minutos del hasta hoy mejor tiempo! Qué sensacional!!

Me siento a cada día enamorado de la vida,del don que Dios nos regala no sólo de existir,sino de entregar,expresar, retransmitir tanta entrega,tanta pasión,tanto amor en lo que hago.

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Ya en la tarde estuve en casa. Antes, compré unas cosas de aseo y cuidado personal.. gasté el equivalente a casi 10 dólares,que fué gran parte de lo que cobré el viernes pasado. Pero gracias a Dios.

Almorcé bien, cené igual.

Escrito de mi autoría el cual causó varios mensajes de amigas en reacción al mismo.

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Ya descanso,ha sido un maravilloso día. Qué agradecido estoy de existir.
Cada segundo cuenta.