Jamás piense que a Maduro le llegarán las ideas por aquello que compró un champú nuevo para la cabeza, no se engañe, ni se moleste, usted vive en su casa pero está condenado a morir muy pronto de hambre o por falta de medicamentos. Y es muy pronto.
Imagine que todos tomamos cerveza una caja semanal. Y existen 100 familias. En 2014 Lorenzo fabricaba 400 cajas, es un ejemplo didáctico. Luego en 2015 fabricó 350 cajas, 50 familias viven con sed de cerveza.
En 2016 fabricó 300 cajas de cerveza, 100 familias tienen la garganta seca de cerveza. En 2017 fabricó 250 cajas de cerveza, 150 familias tienen taquicardia porque no consiguen la cerveza.
En 2018 fabricó 200 cajas de cerveza, 200 familias tomaron el cuchillo de la cocina y están dispuestos a cortar el cuello de las gallinas para hacer sancocho sin la cerveza, son algo peligrosos.
Si en este año 2019, se fabrican 150 cajas de cerveza, 250 familias saldrán con los Cuchillos en mano a buscar a quienes compraron las 150 cajas de cerveza y son más los cuchilleros que los que compraron esas cajas de cerveza, no vale nada que usted se ponga sweater cuello de tortuga, la sed hará que le sea quitado el sweater de una sola jalada y quedará el cuello listo como las gallinas.
Por eso es bueno que a tiempo completo de día y de noche busque como ayuda a la fábrica de cerveza para que produzca el doble por la sed tan hostigante que existe, ayude a los que pueden hacer algo. Empújelos, láncelos a la piscina para que aprendan a nadar. La parábola de la sed y la cerveza, no es de Jesús, sino de quien escribe.
