Los motores de combustión interna remplazaron a los de vapor, pues este se tiene hoy como una forma de energía ya superada; sin embargo las necesidades energéticas no lo considera así, ya que aun desempeña un papel importante, sobre todo en las plantas de energía, donde sirve para impulsar las turbinas que producen electricidad. En realidad no es la fuerza del vapor la que se considera obsoleta, sino el método de calentar el agua y producir vapor. Actualmente en plantas de energía atómica, la reacción nuclear produce calor intenso que convierte rápidamente el agua en vapor.

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Todos los motores tienen un rasgo común: queman combustible para producir energía. Pero los inventores siempre han estado obsesionados con la idea de una maquina de movimiento continuo, que una vez comience a trabajar, genere su propia energía y continúe funcionando indefinidamente sin combustible ni mantenimiento. Fabricar esta maquina parece científicamente imposible, pero por cientos de años los inventores lo han intentado.

Cosas extrañas.