Por seguridad tu mente cree que al mantener todo igual, seguirás sobreviviendo, pues así lo has hecho hasta ahora. Cuando algo cambia, es como si perdiera toda referencia de lo que es y no es seguro, y no nos gusta. Eso es lo que sucede cuando sufrimos una separación, un divorcio, un rompimiento de novios, en fin, una pérdida de alguien importante. Sabes que las cosas están por cambiar, pero no sabes cómo ni que sucederá después y esto nos causa una ansiedad terrible. Pero una vez que entiendes por qué sucede esto, puedes empezar a trabajarlo. Puedes empezar a trabajar en tu seguridad. Si lo que te da ansiedad es la inseguridad, es decir, la incertidumbre de lo que será la vida sin esta persona, entonces el antídoto es crear seguridad.

Es un error creer que las personas son "nuestras" (mi novia, mi esposo, mi amiga, etc). Nadie es nuestro y cada quien está en todo su derecho de elegir el camino que mejor le parezca. Tenemos que aprender a ver hacia lo bueno que viene en lugar de lo malo que ya sucedió, porque esto no nos sirve de nada en lo absoluto. Cuando reconoces que tienes un largo camino por delante lleno de experiencias increíbles si tan sólo te animas a enfocarte en el futuro, verás lo rápido que aprendes a superar cosas como estas.

Esto es tan sólo una fase, también va a cambiar. En unos años verás cómo recuerdas esto como un momento que definió el tipo de persona que eres. Una ruptura amorosa puede ser lo mejor que te pudo haber sucedido, porque te da la libertad de elegir. Crea espacio para que lleguen circunstancias mejores. Mejores amigos, parejas, experiencias en fin.

Es muy posible superar un desamor o una ruptura relativamente rápido, pero necesitamos enseñar a nuestra mente que no pasa nada, que estamos en control, y que sabemos hacia a dónde vamos.