Una tarde pensando en mil y un cosas, llegas de la nada sin saber de tu existencia y me demuestras con solo tres palabras que solo seres humanos nos amarramos a veces a situaciones toxicas al miedo de cerrar una puerta y que la otra no abra. A veces necesitamos ese cierre en nuestra vida para poder ver más allá del espejo.
Un camino sin estereotipo que nos demanda la sociedad, vamos a comenzar nuevamente nuestra vida sin importar el que dirán puesto a que somos dueños de nuestra felicidad y nadie puede derrumbar nuestra alta estima.
Sin esperarlo hoy aprendí una nueva lección de vida, y como lo expreso ese amigo incógnito siempre debes dar un salto de fe y confiar en nuestras potencialidades, siempre debemos confiar en nosotros mismos.
Autoestima
Confianza
Autoestima