Resultado de unas cuantas divagaciones.

          Hace poco decidí darle una limpieza profunda a todos los libros, libretas y carpetas que tengo en mi biblioteca. En realidad son tantos que tuve que pasar un gran lote a un estante en la habitación de mi papá (sé que no viene al caso) Mientras inspeccionaba me encontré con varios dibujos hechos por mí, de personajes de mi historia, hechos sin tenerlos planeado.

          Si han leído mis posts anteriores ya sabrán que me gusta escribir; crear mundos, relatar historias, es algo que me apasiona desde la infancia aparte de dibujar. He creado unas cuantas en una plataforma exclusivamente para escritores —tanto novatos cómo experimentados— llamada wattpad. Esta nos permite subir obras nuestras y leer la de otras personas que compartan esta misma pasión.

          Como es de suponer, me he encontrado en el proceso de estructurar personajes que le darán vida a esa historia que relato. Desde puntos físicos hasta los psicológicos. No es algo sencillo porque debemos tener en cuenta que cada una de sus acciones debe tener coherencia con lo que se escribe, sino no tendrían verosimilitud.

          Los dibujos que pueden observar son de esos personajes y el cómo me los imagino. Al momento de dibujar (en mi caso) lo hago apoyándome de alguna imagen que pueda retratar, por eso se me da bien hacer retratos de familiares, animales, etc. Siempre he tenido dificultad en hacer algo que salga de mi imaginación, que yo visualice y plasme en la hoja, así que al ver estos dibujos recordé con alegría que eran el resultado de muchas divagaciones en clase. Y me gustan.

          Debido a que casi no charlo con mis compañeros, suelo hacer garabatos en las últimas hojas de mis cuadernos para pasar el tiempo, algunos son tan extraños que ni forma se le encuentra. Pero estos en específico me gustan porque siento que reflejan a su manera a los personajes que he creado. No son los mejores, quizá la anatomía no esté del todo correcta, o el estilo de los dibujos es confuso, mas me agradan y quería compartirlo con ustedes.

          Los hice en un momento que no me importaba ser perfeccionista, después de todo creía que no tendrían importancia ¿Quién esperaría obtener algo de valor en momentos de aburrimiento? Justo ahora es que puedo notar que sin pretenderlo dibujé al azar y me gustó el resultado.

          Hay un total de cinco personajes (sí, hay más dibujos, pero ya explico el porqué) La chica de cabello rulo y cuernos en la cabeza es la protagonista, me centré tanto en ella que salieron varias representaciones de su forma, quizás en un intento de buscar cuál era la que más acertaba. Ella, así como la ven, representa a la naturaleza.

          ¿Saben lo hermosa que es? ¿La belleza que alberga y que muchos no logramos percibir? No, no soy ambientalista, pero el no serlo no implica que no tenga ojos para saber que estamos haciendo algo mal. ¿Por qué arrancar una flor es normal? Forest, este personaje, es la representación física de la naturaleza, quien a medida que pasan los capítulos revela que su conexión con ella es mucho más fuerte de lo que parece. Impulsada por varios motivos de su pasado termina encerrada en un bosque a quien debe cuidar de la mano humana.

          Su cabello es rojizo y pomposo, sus ojos verdes como las hojas de un pino y su postura erguida ante la amenaza que representa nuestra raza para ella. Normalmente se muestra como un personaje férreo, que no perdona a nadie que se atreva a lastimar un poco la vida que ella se encarga de preservar, pero al conocer a otros personajes se va mostrando un lado bondadoso y benevolente, algo turbulento y acongojado por el pasado que le carcome el alma. ¿Y cómo no va a ser así? No podemos esperar que la naturaleza, como un personaje, sea feliz, tomando en cuenta la cantidad de daño que le hacemos.

          Pocas veces nos cuestionamos el daño que causamos o lo mal que se ve botar desechos a la calle fuera de un basurero. Lastimosamente siempre que camino por las calles de Caracas veo con pesar cómo se deteriora con lentitud, cómo la imagen pulcra que solía tener se va opacando con el desinterés de sus habitantes. Y estoy segura que no sólo es aquí, sino en muchos otros lugares.

          David, este chico delgado, es un joven cuya infancia estuvo llena de dificultades. Con una enfermedad cardiaca y una madre sobreprotectora, no experimentó la alegría de la niñez, únicamente el amargo sabor de la soledad. La única compañía que tenía era el lejano sueño de poder explorar lugares tan mágicos como mostraban los canales de televisión: montañas, cayos, selvas, bosques, entre otros. Al conocer a sus dos mejores amigos supo que a pesar de las dificultades podía lograrlo. Se volvió entonces un personaje aventurero (dentro de lo que cabe), alegre y amante de lo natural.

          No creí que iba a llegar a valorar el resultado del aburrimiento en horas libres. Muchos han caído en el olvido por el poco interés que les he tomado, pero esta vez fue diferente. ¿Les ha pasado algo similar?