EL PRIMOGÉNITO

Este tema de la primogenitura es incluso hasta bíblico debido a la importancia de ser el hijo mayor dentro de una familia, ya que ser el primero en nacer trae consigo muchos beneficios al momento de tomar decisiones, repartir algún bien entre otros. En la biblia hay un episodio donde unos hermanos incluso desde el vientre de su madre peleaban por ser el primero en nacer para disfrutar de la primogenitura. En mi biografía les comente acerca de que soy hijo único de mi mamá y el hijo mayor de mi papá, aunque inicialmente no era el primogénito, la ida de la que hubiese sido mi hermana mayor me dio el privilegio de ser el primogénito de mis padres. Ser el primer hijo tiene sus ventajas y sus desventajas, unas cómicas y otras no tan cómicas, unas trágicas y otras menos trágicas, compromisos fuertes y desafíos grandes pero en conclusión la primogenitura es una bendición desde muchos puntos de vista.

El ser el primogénito de mis papas ha sido bastante interesante porque los más grandes esfuerzos y experiencias fueron dedicados para mí. Algunos beneficios de ser el primer hijo fueron:

• Estrenar ropa y zapatos sin que algún otro se lo hubiese puesto antes.
• Disfrutar de fiestas sin que fuesen repetidas o parecidas a la de tu hermano o hermana mayor.
• Eres el primer amor de tus padres.
• Tus juguetes los sacas directamente de la caja.
  Estos beneficios suenan un poco egoístas y egocéntricos y en realidad a primera vista pareciera que así fuera pero hay unos beneficios y unos compromisos los cuales les diré más adelante.

Con el pasar del tiempo deje de ser hijo único de mis 2 padres y llego un hermano por parte de papá del cual me entere cuando ya estaba bastante mayor. Esto forma parte de una de las desventajas de ser hijo único, no disfrutas de la compañía de un hermano, ni el amor por un hermano y mucho menos de la protección que debería sentir por él, como hermano mayor. Hasta ahora ha pasado mucho más tiempo desde que me entere que mi hermano existía pero solo hasta ahora es que no siento rencor y de a ratos he podido compartir con él, como mi hermano. Bueno de quien le hablo es Rafael Estanga Jr. mi hermano menor, pero aunque el llego pues yo aún sigo siendo el primogénito y el mayor.

Sobre mis hombros siento el compromiso de honrar el nombre y apellido de mis padres, el compromiso de dejar en alto el apellido Estanga y Bolívar. Seguir la descendencia y hacer crecer la familia, esto hace que yo deba seguir los buenos pasos de mis padres, aprender de sus errores para no repetirlos y demostrarles que sus esfuerzos no han sido en vano. Y sin ningún tipo de temor me siento orgulloso de ser el primogénito de Coromoto Bolívar y Rafael Estanga, ese par de viejitos que amo con el alma y a los cuales quiero tener por mucho tiempo.