Fotografía tomada con celular Huawei P8 Lite 2017 usando APP Photo Lab
Desde que se crearon las sociedades hemos vivido en un mundo donde hay héroes y villanos (y cada persona tiene el “poder” de calificar a esos héroes y villanos desde su punto de vista), por ejemplo, en tiempos de monarcas, emperadores y reyes existieron buenos y malos gobernantes. Los reyes durante la época absolutista estaban sometidos y limitados por la moral y la ética, e incluso por la religión, (muy distinto al totalitarismo) estos gobernaban e imponían su poder en el pueblo sin que sus gobernados pudieran objetar, replicar, oponer, contradecir, refutar, contestar o controvertir al rey, y aun así los gobernados adoraban viéndolo como un héroe al monarca sin importar que todos los aspectos de sus vidas estuvieran dirigidas por un hombre igual a ellos (en teoría). En cambio sí lo vemos desde el punto de vista cuando el rey se dedicaba a invadir territorios que no le pertenecía de manera bélica a manos de fuerzas militares para este influir, controlar o someter al pueblo, este era visto como un villano por los colonizados, y así asume los dos roles de héroe y villano a la vez.
El ser humano es capaz de hacer cualquier cosa para preservar su supervivencia. Pablo Escobar logró obtener su estatus de héroe frente al pueblo comprando sus conciencias con regalos y favores que cubría las necesidades de los colombianos que lo apoyaban. En este caso, es muy evidente que la moral y la ética no son tomadas en cuenta para calificar de bueno o malo a una persona con una mala reputación en lo referente a la conducta y el apego a las normas de la sociedad civilizada.
No es siempre necesario manipular el juicio objetivo de las personas con cosas materiales como lo hacía Pablo escobar, también pueden ser manipulados de manera psicológica con simples palabras. En Venezuela el narco dictador Nicolás Maduro ha logrado obtener su estatus de “héroe” con populismo. Con el amplio poder que tiene de los medios de comunicación, ha logrado una aceptación de una parte de los ciudadanos transgiversando la cruda y triste realidad del país. Durante muchos antes, desde su predecesor han utilizado la técnica de la demagogia para tomar el poder y controlar a Venezuela a su antojo.
Todas esas personas que han sido manipuladas por esos supuestos “héroes” no tienen conciencia alguna de lo que es la moral ni la ética, ni mucho menos saben de valores y buenas costumbres. Son seres humanos convertidos en animales que son capaces de comerse unos a los otros con el fin de proteger los intereses de sus supuestos héroes; anteponer sus vidas y sobre pasar quebrantando las leyes que rigen una sociedad humana civilizada.
Unfortunately, despite the great technological and scientific advances that we had never imagined would come true, they did, what we really had to develop positively every day is deteriorating, and it is about our society and the pure essence of the human being. Continuously every day we observe in the news from all over the planet information about murders, genocides, rapes, human trafficking, and all kinds of evils, injustices and base acts done by "human" beings to their fellow human beings; few goodwill actions are being taken to improve our human species; With all this we realize that despite believing we are evolving we are involving and becoming savages in a world with all the resources available to live in harmony, but savagery is slowly consuming us.
It is not always necessary to manipulate the objective judgment of people with material things as Pablo Escobar did, they can also be psychologically manipulated with simple words. In Venezuela, the narco-dictator Nicolás Maduro has managed to obtain his "hero" status with populism. With the broad power it has of the media, it has achieved an acceptance by a part of the citizens, transgressing the harsh and sad reality of the country. For many years before, since their predecessor they have used the technique of demagoguery to seize power and control Venezuela at their whim.