Créditos: Taylor Jewell
Paul Franklin Dano, nació en New York en 1984. Es actor y productor de cine, teatro y tv. Todos les conocemos como Paul Dano, un tanto retraído, sencillo; disciplinado, metódico y estudioso del cine. Considerado un prodigio por algunos, su capacidad la mostró desde la niñez y sin ceder ante los delirios hollywoodenses ha logrado estar, resaltar sin perder su identidad artística.
Desde que vi Little Miss Sunshine hace ya algunos años atrás comprendí que estaba frente a un artista, Paul Dano en mi humilde opinión no debe considerarse menos que eso. Posee ciertos talentos que convierten a sus personajes en seres entrañables, son emocionales y con mucho poder. Sus interpretaciones tienen características similares, por lo general con conflictos de personalidad, mentales; con rasgos muy femeninos en algunos casos; pero sin duda extraordinariamente bien estructurados.
Little Miss Sunshine (2006).
Luego de mirar más su trabajo llegué a pensar que tenía conflictos religiosos o espirituales, tal vez por lo denso de algunos de sus personajes; pudiera decir que son oscuros; contradictorios, complejos; ricos en lenguaje corporal. Paul Dano es capaz de trascender la pantalla sin necesidad de gritar ni gesticular en demasía, domina muy bien el arte de actuar.
Otro talento maravilloso de Paul, es que ha logrado papeles magistrales como en Pozos de Ambición junto al triple galardonado; Daniel Day Lewis y aun así; pareciera estar oculto en su burbuja creativa y artística a una distancia prudencial del tumultuoso mundo del espectáculo.
Pozos de Ambición (2007).
Paul Dano es para mí una rareza, tiene una afinidad con el cine independiente; muy estadounidense; le encanta experimentar. Al enterarme de que realizó The Good Heart, un filme islandés; me agradó aún más. En este filme mostró un lado más hostil, violento tal vez. Mostrando de alguna manera su inconformidad con la sociedad banal, es posiblemente su manera de revelarse al mundo como un artista ecuánime; fiel creyente de su línea creativa y cónsono con un cine más puro sin perder un ápice de autenticidad.
Una de sus escenas favoritas para mi es 12 Years a Slave donde Paul muestra un desenfreno único, nos regala una de sus mejores muestras de poder en la pantalla grande; un personaje dominante; inconforme; lleno de prejuicios. Les compartiré el link de la escena.
12 Years A Slave (2013).
Pero luego de todo los mostrado actoralmente sigue sin conquistar un Oscar, en lo personal que creo que por Pozos de Ambición debió ganarlo o al menos recibir una nominación; pero el mundo del cine es a veces un tanto cruel o injusto; recordemos el caso de Leonardo Di Caprio quien finalmente recibió el Oscar. En el caso Paul creo será menos dramática la espera porque desde mi perspectiva no lo mueven los premios, su abstracto mundo artístico ama crear y eso es lo que finalmente es un artista.
Ahora Paul destapa otra faceta de si, la vena actoral se mantiene pero va más allá esta vez; se atrevió a dirigir. Y según el tráiler del filme que les compartiré, en Wildlife sigue línea creativa; densa, personajes intrigantes con colores algo indie; un estilo que le viene como anillo al dedo. En este filme trabaja con Jake Gyllenhaal a quien conoce actoralmente, recordemos que en Prisioners compartieron y dejaron una escena exquisita.
Prisioners (2013).
Ahora Paul dirige a Jake y a una maravillosa Carey Mulligan, quien le da un enorme valor al filme ya que se encuentra en un muy buen momento. Dano en Wildlife muestra otra faceta, la de escritor; el guion es de su autoría y coescrito junto a su pareja sentimental; la también actriz, Zoe Kazan. El guion está basado en la novela Incendios de Richard Ford de 1990, Ford para muchos es considerado el heredero de Hemingway; algo que ha rechazo en varias oportunidades.
Aun así logró atrapar a Dano con su narrativa excelsa y con muchos matices, pareciera que se complementan el uno al otro.
Pero lo realmente importante y a destacar, es que el Sr Paul Dano abre la posibilidad de ganar un premio Oscar no sólo como actor; también deja claro que pudiera lograrlo como director; aunque es muy pronto para asegurarlo. Wildlife es un buen inicio para un artista que no parece conocer límites a la hora de crear, de arriesgarse y mostrar su visión; una abstracta pasión por la interpretación.
Trailer de Wildlife, IFC Films (2018).
También pudiera ocurrir una rareza con Paul Dano, de seguir dirigiendo y actuando; es muy posible que gane o al menos sea nominado como actor y director; tal vez no con el mismo filme pero algo si ocurrirá, ganará un premio Oscar más temprano que tarde porque Paul no ha hecho otra cosa que merecerlo; el premio llegará.
Paul Dano es arte.
Cualquier recomendación será bien recibida, abrazos.
Gracias por leerme, hasta el próximo post.