Tomar al toro por los cuernos

El viento es una fuerza natural que es capaz de arrasar con lo que encuentre a su paso, mueve, crea, destruye y modifica lo que se que encuentre en su camino. Pero en la misma naturaleza muchos animales usan la inestabilidad e irritabilidad del viento para un abrir un mar de posibilidades, las aves surcan los cielos gracias a las corrientes de aire caliente y logran descender con las corrientes frías, algunas logran viajar miles de kilómetros por el impulso de este; pero el ejemplo mas fiable son las plantas rodadoras, esas que acostumbramos a ver en las películas del viejo oeste justo antes de un escena épica. Estas, solo se dejan llevar, solo cierran sus ojos fingiendo estar muertas y dejan que sus posibilidades las decida su locación final, a veces fatal y a veces de bonanza, ellas solo dejan que el problema las arrastre a donde este quiera.
Muchas personas en ves de ser como las aves y aprovechar las oportunidades que los cambios y las situaciones difíciles nos muestran, deciden tomar la postura de una planta rodadora y solo pasivamente esperan a que la tormenta termine. Ambas posturas son correctas, la vida es una sumatoria de nuestras buenas y malas decisiones, nunca antes mejor dicho, pero, ¿que prefieres? ¿dejar todo al azar y al destino? o ¿tomar por ti mismo las oportunidades ? y tomar al toro por los cuernos...