Sexting:
¿Cuantos de nosotros no lo hemos hecho? Es una práctica que actualmente es bastante atractiva y excitante. Para quienes no saben de qué se trata les explico: el “sexting” es cuando usamos la tecnología para comunicarnos con una persona (o varias, no sé quien lo ha hecho así) y a través de las palabras tenemos un cierto nivel de intimidad con ella, escribimos cosas sexuales y enviamos videos o fotos muy subidas de tono. Ahora que ya sabes de qué va el sexting, estarás recordando cuando lo hiciste o con quién te gustaría hacerlo y todo esto suena muy interesante ¿no? Pues la verdad es que sí, es muy interesante y divertido, sobre todo cuando la otra persona realmente te gusta. No vengo a decirte que es algo malo e inmoral ya que nuestra sexualidad es muy amplia y nosotros como seres humanos siempre estamos buscando innovar en nuestra vida sexual, tampoco te voy a decir que no lo hagas si esa persona no es tu novio/novia porque somos libres de practicar el sexo como queramos, con quien queramos y cuando queramos, pero como aquí no te vengo a hablar de moralidades ni pudor si te voy a hablar sobre los riesgos de practicar esta actividad tan sexy.
En el sexo hay muchos riesgos si no sabe practicar con precaución y el sexting no se salva de esta premisa. Dado a que no existe una aplicación especial para realizarla, podemos hacerlo desde nuestros celulares y los medios más usados son: Snapchat, Whatsapp, Vine, Instagram e incluso el email personal. Ahora bien, el meollo del problema no radica en “si lo hiciste o no lo hiciste” sino “con quien lo hiciste”. Al igual que el sexo, tienes que escoger muy bien con quién lo vas a practicar, somos total y plenamente libres de tener sexo con quien queramos pero si lo hacemos con alguien de confianza pues entonces es mucho mejor, sino nos exponemos a enfermedades de transmisión sexual, (y si amigo/a lector/a, si existen ETS que se contagian con condón) e incluso a que esa persona hable más de la cuenta sobre nosotros con otros.
Por lo tanto el sexting tiene sus consecuencias, tal vez no son enfermedades pero son consecuencias graves también, entre estas podemos encontrar:
1) Publicación de imágenes: los que practican esto corren el riesgo de que sus imágenes o fotos sean publicadas y las redes sociales más usadas para esto son Facebook y Twitter, una vez más otra razón para no hacerlo con cualquier persona. Piensa muy bien y no te dejes llevar ni por presión ni por la curiosidad, recuerda que puedes evitar un muy mal rato con solo decir “no”.
2) Depredadores sexuales cerca: si las imágenes llegan al alcance de algún depredador sexual cercano a ti, éste muy probablemente te ponga la mira y estarás en peligro. Nada es excusa para un abuso sexual, el único culpable de una violación es el violador pero si podemos evitar la situación es mejor.
3) Chantaje: esta es una de las más predecibles. Cuando tus imagines se encuentran en manos de una muy mala persona es muy probable que intente que hagas otras cosas para “no publicar” el contenido que enviaste, quizás quiera sexo, quizás quiera que hagas otras cosas, quizás te obligue a tomarte más fotos y la lista sigue y sigue.
4) El Bullying: en el mundo existen personas buenas y malas, esto no es secreto para nadie. Cuando las personas están en la etapa de la adolescencia tienen poca capacidad de medir las consecuencias de sus actos, ahora suma a esa poca capacidad de medir las consecuencias con que también hay adolescentes muy crueles y tienes como resultado un desastre social. El “bullying” o las burlas y acoso pueden ser muy comunes (no quiere decir que sea correcto) si las imágenes llegan al instituto donde estudias.
Así mismo, estas consecuencias conllevan a otras como ansiedad y depresión, incluso hay chicos/chicas que no saben cómo afrontar toda la situación y toman la decisión de suicidarse, pero ¿qué hacer en esas circunstancias? Lo primero que debes hacer es hablarlo con tus padres si eres menor de edad y pedirles ayuda. Debes saber que la posesión y producción de material pornográfico de menores de edad es un delito y puede tener consecuencias legales. Por último, sé que probablemente sea una situación muy complicada pero créeme, todo va a mejorar y siempre existe un aprendizaje detrás de momentos difíciles, no te victimices, pon tu caso en las manos de las autoridades competentes y si estás muy ansiosa/a o deprimido/a entonces busca ayuda de algún profesional en la psicología.
No obstante, no todo es malo, la psicóloga Emily C. Stasko afirma que el sexting trae beneficios a las parejas. En su estudio revela que el 88% de las personas alguna vez realizaron el sexting, el 75% de ellas lo hizo con su pareja durante una relación estable, el 43% lo hizo con personas durante una relación casual y el 12% lo hizo con alguien mientras tenía una relación estable con otra persona. En el estudio las personas declaraban que esta práctica les traía muchos beneficios en sus vidas sexuales y Stasko sostiene que aunque estas experiencias si fueron concluyentes, forman parte de los preliminares.
Personalmente opino que si trae beneficios en la pareja, ayuda mucho para acrecentar la confianza y es buenísimo cuando uno de los dos está lejos o en un viaje, de hecho hasta mejora la imaginación sexual y ayuda a salir de la rutina. Lo importante es que exista un acuerdo y que ambos quieran hacerlo, que ambos lo disfruten y lo más importante es que ambos sean personas maduras y seguras. De hecho, Stasko añade que el sexting es beneficioso en las parejas adultas pero en adolescentes es riesgoso.
Mis consejos son:
1) En las fotos no muestres tu rostro, tatuajes que te identifiquen o algunas cicatriz.
2) Usa medios un poco más seguros como Telegram que tiene sistema de encriptación y además tiene una opción de chat “privado”.
3) No lo hagas con cualquier persona.
4) Queda en un acuerdo con la otra persona de borrar todo el contenido.
5) Toma tus precauciones.
6) ¡Disfrútalo!
¿Y tú te atreverías a probar el sexting?