A un buen pan no le niegues un buen vino

Para muchas personas es incluso algo innovador hablar sobre este tema. Lo que para muchos pasa casi inadvertido para otros es un arte en al que dedican su vida. La preparación de bebidas va más allá que seguir los simples pasos de una receta. Un buen coctelero requiere de una altísima creatividad y un excelente manejo de las materias primas acompañada de una sensibilidad para darle un sentido estético a su obra.

De la vista nace el amor

Una vez garantizado que el sabor exalte los sentidos es necesario que una buena presentación realice una invitación a probar y degustar el coctel. La manera en cómo decoramos un coctel ayudara a capturar nuestra atención y que probar la bebida lleve experiencia del comensal a otro nivel y por supuesto que pida un trago más.

Esta experiencia será agradable y sorprendente en la medida en que un artista de la del buen beber sepan recrear vivencias y evoquen sentimientos en el comensal a través de sus obras. Aquí queda respondida la pregunta, si con su trabajo los cocteleros pueden hacer revivir emociones y vivencias pasadas estamos sin lugar a dudas ante uno de los artes de este siglo.