“1er Concurso de Cuentonimios Navideños”

23 de diciembre, presentaba el informe a la Junta justo a las 2:00 pm. Mi mente se dividía entre la explicación a los inversionistas extranjeros y la escasa posibilidad que tenía de poder llegar a mi hogar, a 800 kilómetros de ahí, para la cena de navidad. En mi portafolio llevaba el informe de la junta y el carrito que había comprado "El Niño Jesús", a mi pequeño hijo.

La presentación se perfilaba exitosa, el socio mayoritario de la empresa disfrutaba del interés de sus nuevos aliados. A mí me apretaba la corbata, y no dejaba de contar mentalmente los billetes de cincuenta Bolívares para pagar el transporte a casa en autobús, mientras explicaba el alcance de la inversión en la nueva fórmula química. Guao, yo aquí explicando formulas químicas y no hay ni tan siquiera un miserable cajero electrónico en la principal ciudad del país...rayos!

Terminada la junta, corrí a buscar transporte. Normalmente le huía a las motos. Mototaxista a la vista! Jamás me había sentido tan feliz de montarme con uno de ellos.

En pocos minutos estábamos en la terminal de buses y la cantidad de personas era abrumadora. Llegue a la línea de autobuses directos y no había cupos disponibles hasta dentro de tres días. Respira Ramón, si llegas...

A lo lejos observé una situación extraña; una persona que había comprado su pasaje ahora lo estaba devolviendo al revendedor. Esta es la mía compadre! Tenía en mi haber 500 Bolívares en billetes de 50. Considerando el aumento del pasaje de Diciembre eso sería suficiente. Pero resultó que no. El pasaje me costaría 800 en billetes de 50. Uf! había que ponerse manos a la obra.

Qué llevo encima de valor, que pueda vender? Las dos cajas de cigarrillos! Saqué las cajas y sin importarme traje ni corbata y mucho menos maletín, comencé a ofrecer los cigarrillos al detal…se vendieron todos y obtuve ganancia, qué tal? Gracias a la Providencia, el revendedor no logró colocar el pasaje con otro ser. Ese puesto fue mío! Por fin, rumbo a casa a llevar el encargo del Niño Jesús.

Fuente

Esto le sucedió al amigo, del amigo de un amigo.

Isabel

@isabellavado