Comparto con ustedes este deporte muy peculiar, volar en Parapente, para mí es un deporte muy extremo, pero emocionante a la vez, se requiere de mucho entrenamiento y autocontrol, por supuesto, tener unos nervios de plomo jejeje. Visitando el estado Mérida, tuve la oportunidad de presenciar, a unos deportistas en plena práctica, muy amables por cierto, esto sucedió en las montañas de nuestros Andes venezolanos.

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Durante la travesía por la carretera que transita por el Páramo, nos topamos en el camino con esta hermoso vuelo en Parapente (paracaídas o planeador), estos señores me explicaron, que se deben utilizar implementos de seguridad tales como casco, lente, Gps, radio, paracaídas y una buena dosis de valentía jejeje; ellos en sus inicios, realizaban sus prácticas con la ayuda de lanchas, en el Mar Caribe, con sus respectivas radios y kit de primeros auxilios para cualquier eventualidad, aunque, generalmente, no ocurren eventos que lamentar. Este aparato está compuesto por las alas llamadas parapente y nylon que sostienen el armazón, el aparato completo no presenta compuestos rígidos, lo que hace liviana la carga, el sistema de aterrizaje lo componen nuestras piernas, por lo que se requiere de una buena condición física.

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Para realizar esta práctica, se debe disponer de un día soleado, sin vientos huracanados, para evitar accidentes, ya que de hacerlo en condiciones climáticas desfavorables, se hace más difícil de dominar el parapente durante el vuelo. Desde ese momento, quedé con las ganas de vivir la experiencia de sentirme libre, volando por los cielos de los Andes Venezolanos, debe ser un momento de desborde de emociones y sobre todo, de mucha adrenalina.

Estas fotos fueron captadas con mi teléfono Samsung Galaxy SIII