Sanando memorias ancestrales arraigadas en lo mas profundo, dolores guardados en el tiempo.
Respirando, volviendo a nuestro centro, conectando con el corazón a traves de la pulsación, una de las tantas formas de poder llegar a lo mas profundo de nuestra esencia para reencontrarnos con el niño interno, para perdonar y sanar.
Somos luz, somo amor, sanemos para que emerger con el poder del fuego transmutador que yace en lo mas profundo.