La energía solar es renovable e inagotable, obtenida a partir de la radiación electromagnética del sol.
Se obtiene por medio de paneles y espejos.
Es una de las fuentes de energías renovables más fáciles de producir, lo que está haciendo que se esté extendiendo su uso en las zonas climáticas con más horas de sol.
Dependiendo del origen y procesamiento, podemos dividir la energía solar en diferentes tipos:
Energía solar térmica: Aprovecha la energía del sol para producir calor, que posteriormente se usa como fuente de energía tanto a nivel doméstico como a nivel industrial, transformándola en energía mecánica y a partir de ella en electricidad.
Distinguimos tres tipos de energía solar térmica en función de su temperatura:
1- Energía térmica de baja temperatura: si la temperatura es inferior a 90ºC.
2- Energía térmica de media temperatura: si la temperatura oscila entre los 90 y 250 ºC.
3- Energía térmica de alta temperatura: para aplicaciones que necesitan temperaturas superiores de 250 - 300 ºC.
La clasificación de la energía solar térmica en función de la temperatura de trabajo es importante ya que dependiendo de ésta, la aplicación será diferente. Para temperaturas bajas, su aplicación se focaliza en el calentamiento de agua caliente sanitaria en viviendas; para temperaturas medias se aplica en procesos industriales y para altas temperaturas se aplica en centrales de generación eléctrica que conocemos como centrales termosolares.
Energía solar fotovoltaica: Consiste en obtener directamente la electricidad a partir de la radiación solar. Esto se consigue gracias a la instalación de paneles solares fotovoltaicos que cuentan con células de silicio que transforman la luz y calor del sol en electricidad. Puede usarse tanto a nivel doméstico en edificios y casas, como en grandes instalaciones: las conocidas como plantas fotovoltaicas.
Energía solar pasiva: Se consigue principalmente con la arquitectura bioclimática: un principio de diseño de edificios donde, con el uso de diferentes materiales y orientaciones, se consigue utilizar la energía captada durante el día para mantener el edificio cálido durante la noche, o evitar el calor excesivo durante las horas de más sol. En pocas palabras, consiste en adaptar los edificios a la climatología de la zona para conseguir una climatización perfecta en cada momento.
En el diseño solar pasivo las ventanas, paredes y pisos están hechos para colectar, guardar y distribuir la energía solar. El uso que se le de a ésta, dependerá de la climatología que haya en el ambiente.
¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de la energía solar?
Ventajas
1- Es una energía limpia que reduce la huella de carbono de manera significativa, pues no genera gases de efecto invernadero ni contamina durante su uso (tan solo la contaminación creada al producir los paneles solares).
2- Es renovable y sostenible.
3- A diferencia de otras energías renovables, la solar puede calentar agua, líquidos e inclusive infraestructuras.
4- No requiere extracción constante de materiales para su funcionamiento, por lo que es una energía muy económica cuya inversión inicial es fácil de recuperar durante los años: un panel solar puede tener una vida útil de 40 años.
5- Es abundante y está disponible para cualquier persona.
6- El uso de energía solar potencia la seguridad energética al reducirse la dependencia de suministros del exterior.
7- La energía solar disminuye la necesidad de combustibles fósiles y ayuda a conservar los recursos naturales.
Desventajas
1- Baja eficiencia en cuanto a la energía eléctrica que puede convertir, alrededor de un 25%; aunque según avanza su desarrollo se está logrando aumentar su rendimiento.
2- A la larga la energía solar puede salir barata, pero el coste inicial de su instalación es elevado y no es accesible para todo el mundo.
3- Es necesaria un área de instalación grande con el objetivo de producir una cantidad de energía eléctrica adecuada para cubrir las necesidades energéticas.
4- No es constante, ya que fluctúa a lo largo del día y por la noche no está disponible.
5- La contaminación es un problema para la energía solar, por lo que en ciudades con altos grados de contaminación atmosférica su rendimiento es mucho menor.
6- Durante la producción de los paneles solares se emite gran cantidad de gases de efecto invernadero y desechos tóxicos. Una desventaja que compensan durante su uso reduciendo la huella de carbono.
Impacto Ambiental
La energía solar tiene un impacto positivo en el medioambiente gracias a que con su uso dejamos de utilizar energía producida con combustibles fósiles y por lo tanto reducimos las emisiones de CO2 a la atmósfera. Sin embargo, su uso también tiene ciertos impactos negativos como el uso de minerales, el uso del agua, modificación del hábitat y de los paisajes.
Como se puede evidenciar, ninguna energía limpia o renovable es perfecta a los ojos del medioambiente. Algunas presentan altos costes ambientales durante su fabricación, y otras, problemas con la gestión de sus desechos una vez acabada su vida útil.
Sin embargo, una combinación de todas ellas consigue un efecto neto positivo en el medioambiente gracias a tener una utilidad por encima de los 30 años. Lo que se traduce en 30 años sin emitir CO2 a la atmósfera ayudando al medioambiente a regenerarse más rápido.