Una ilusión que se ha fortalecido por la aparente inmaterialidad del internet y las criptomonedas, es que el crecimiento de la economía digital no tiene efectos sobre nuestro planeta.
Algunos emprendedores, piensan que porque los productos que crean están en el mundo digital, éstos no tienen que ver con la extracción de recursos que sostiene nuestra economía.
Olvidan que el consumo energético de la realidad digital aún se basa en la quema de combustibles fósiles. Recurso identificado como el principal causante del cambio climático.
Además de que la producción de los dispositivos digitales depende de la expansión de la minería en búsqueda de tierras raras y litio.
Los retos de la crisis ecológica no desaparecerán con la economía digital ni con sus realidades alternas o metaversos.
