Distractores emocionales

Desde hace muchos años en el ámbito de la medicina se habla de la PsicoNeuroInmunoEndocrinología (PNIE), actualmente PsicoNeuroInmunoHormonología, ciencia que explica como nuestros pensamientos y emociones si no son “controladas” y si se mantienen en el tiempo nos pudieran enfermar.

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Para mí, esta ciencia une la programación Neuro Lingüística (PNL) y las neurociencias. Si bien es cierto, ambas disciplinas tienen mucho en común, quienes conocen en profundidad este tema saben que todos los seres humanos somos emociones puras. De aquí parto hoy para hablar de los Distractores emocionales.

Los seres humanos independientemente de donde vengamos, como nos desarrollamos como raza, etc., estamos para SER y estar siempre felices. Sin embargo, este estado de felicidad es muy vulnerable dependiendo del inconsciente y del consciente de cada persona. Carl Jung, hablaba de la sombra del ser humano, que todos tenemos un lado oscuro, en el inconsciente y que lo vemos reflejados en las personas que nos rodean. En este sentido, también hablaba de inconsciente colectivo, es decir, si la mitad más uno pensaban y sentían lo mismo la realidad se reflejaba en la sociedad donde uno se desenvuelve.

Y aquí es donde voy a profundizar de los distractores emocionales. Si es cierto que nacimos para SER y ESTAR felices, porqué muchas de las sociedades del mundo no lo son? Tan sencillo… por los distractores emocionales.

Un distractor emocional, es aquella premisa (o problema) que inunda primero nuestro pensamiento y luego nuestras emociones y que se mantienen en el tiempo para mantenernos sumergidos en la emoción de aquella persona que la genera. Esta premisa es desarrollada primero conociendo muy bien a la población y luego influenciándola en los factores que a esa población le parezca más importante. Por ejemplo, todos los seres humanos debemos respirar, comer, dormir y distraernos (divertirnos) como materia básica de vida. Cuando uno o más de esos factores son afectados en el tiempo, se convierte en un distractor emocional.

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Con respecto a la respiración sería muy fácil decir, que el aire nadie puede “manipularlo” (al menos que exista una nueva bomba atómica, por ejemplo, o una guerra biológica ambiental) pero sí nos pueden manipular por medio de un distractor emocional que se convierta en ansiedad, la manera en como respiramos, y aquí como médico quiero decir, que esto es grave, ya que todos los tejidos necesitan captar oxígeno y retirar CO2 de los mismos para mantenerse sanos, por lo que si no tenemos una adecuada respiración el ciclo celular (ciclo de Krebs) no se realizará normalmente.

Con respecto a comer, aquí si hay mucha tela que cortar, totalmente manipulable, “si no haces lo que digo, no te proporciono el alimento” y esto es de instinto básico de cada persona, cualquiera que sea emocionalmente manipulable, caerá en esto.

Con respecto al sueño, si te mantienen en preocupación permanente, el organismo genera adrenalina (hormona del stress) disminuye la formación de melatonina (hormona que regula el sueño) y por tanto la persona pudiera tener insomnio de conciliación o despertarse en la madrugada y no volver a conciliar el sueño.
Y por último si te afectan las primeras necesidades antes descritas, no vas a tener tiempo ni ganas de divertirte, te borrarán la sonrisa del rostro y por tanto afectarán tus relaciones interpersonales.

Sin embargo, y a pesar de esto, gracias a estas mismas ciencias que nos explican cómo nuestras emociones pudieran ser manipuladas, también nos dan las estrategias necesarias para que primero las identifiquemos y luego tratemos a tiempo antes de que manifestemos física, emocionalmente o psicológicamente las mismas.

De estrategias muchas, sin embargo, yo recomiendo tres básicas.

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Primero, pase lo que pase: MEDITE. Meditar, no es colocarse debajo de un árbol como lo hizo Buda y quedarse allí indefinidamente, tampoco es agarrar un rosario y ponerse a repetir palabras generadas por otros seres humanos con el propósito de la manipulación. Meditar, es sentarse en un lugar tranquilo, cómodamente, con los ojos cerrados o medio cerrarse (para aislarse algo desde el punto de vista visual de la realidad) y concentrarse en la respiración. Los pensamientos siempre van a surgir, pero aquí lo importante que detenerlo, hacer conciencia de lo que está pensando y volver a concentrarse en la respiración. Hacer esto, todas las veces que sea necesario y por el tiempo que ud. lo desee. Mientras más lo practique le aseguro (LE JURO) que lo va querer hacer cada vez más tiempo.

Lo segundo que yo aconsejo, es hacer conciencia de la realidad que lo rodea y haga conciencia de que si bien esa realidad existe, depende SÓLO de usted que le afecte. Cada quien quiere vivir la vida que quiere, no intente cambiar a nadie de manera obligatoria, permítase saber que cada quien es como es y que uno está sólo para acompañarlo, o NO.

Y tercero, igual pase lo que pase, coma frutas y verduras como mínimo. Las frutas son fuente de vitaminas y minerales que el organismo necesita para mantener el funcionamiento celular básico. Si ud. hace estas 3 premisas (para empezar) el sueño probablemente no se vea tan afectado.

Por hoy, lo dejo hasta aquí. Puedes encontrarme siempre en las redes sociales por @anaviteko, ante cualquier duda, comentario o asesoría.

Gracias por tu Tiempo al leer este post.