Amores en el agua

Eso decía la niña en el hotel: “los peces tienen amores en el agua” la escena llamo la atención, pues la inocencia cargada de fantasía de la niña, hizo un momento ameno en la espera por el registro hotelero. A decir verdad, la alegría por la vida en todas sus manifestaciones es maravillosa; nos gustaría, -dicen los ecologistas- que siempre pudiéramos mostrar fotos reales como la de esta pared decorativa. Es una tarea de todos los seres humanos, pues sólo nosotros en la creación tenemos la capacidad de decidir.

Como hoy cada 22 de marzo se hace un llamado a todas las entidades responsables por el buen uso del “oro azul” como también se le conoce, debido a su fundamental importancia en la sobrevivencia de las especies. El blog, -ecocosas.com- nos señala la opinión de la activista Maude Barlow, cuando dice que <quién controle el agua, tiene el poder> como si fuera una mercancía caprichosa. La activista se reviste de un maravilloso documental dando luces sobre las actividades de empresarios y gobiernos por el control y venta del líquido vital.

¿Un negocio? Quizás los más incrédulos se pregunten, sí, es una industria de millones de litros, que generan beneficios a muchas industrias; el oro para su proceso requiere de lavado en los ríos; purificarla y llevarla por las tuberías, también genera riqueza a unos pocos y nada que hablar de la embotellada y la saborizada; sí, ya es una mercadería que tiene buenos nichos de mercado, la pelea siempre será por la privatización; algunos abuelos nunca llegaron a sólo imaginar que tendría un lugar en el supermercado.