Un año antes de quedar embarazada mi Dr. me detecto Síndrome de Ovarios Poliquisticos (SOP), cumplí con el tratamiento y mis ovarios se liberaron de los quistes, lo que me podría ayudar a quedar embarazada de manera más fácil.
A principios de 2018 me tocaba regresar a consulta para chequearme, porque pasaron más de 7 meses y no había podido quedar embarazada, pero entre el día a día, la perdida de mi suegro y en el fondo un poquito de miedo, postergue la visita al médico hasta finales de marzo.
Ese día fui nerviosa, sintiendo que me darían buenas noticias, pero no fue así. El eco reflejó nuevamente SOP, le dije a mi Dr. que no quería tomar otra vez anticonceptivos porque esperaba embarazarme y quedamos que antes cualquier cosa debía hacerme un examen (cosa que hice ese mismo día) para ver si esto estaba influyendo en el no poder quedar embarazada y volver con el resultado.
En la espera caigo en cuenta que tenía días de retraso, lo achaqué al SOP, algo que nunca me había pasado, pero así lo asumí. Llegó el resultado y concreté la cita médica pero en el fondo tenía la duda de estar embarazada, mi esposo me dijo que me hiciera una prueba de sangre y por cosas del destino el laboratorio tuvo un problema y no me pudieron entregar el resultado, ya al día siguiente tenía la consulta así que me fui con la incertidumbre.
Luego de que mi Dr. vio el resultado nos dijo: "no hay nada de que preocuparnos"; dio sus recomendaciones y al terminar nos preguntó: " ¿y qué más?"; es cuando le comento que tenía más de 10 días de retraso, su respuesta fue y " ¿por qué no empezaste por ahí?, te tengo que revisar". Mientras me cambiaba para el eco mi corazón latía a mil por hora, ya lista y viendo el monitor junto a mi esposo, el Dr. nos dice: "ajá, ¿qué hay aquí?, ¡Esto es un saquito!". Yo quedé en shock (porque sabía lo que significaba) y mi esposo no comprendía nada todavía, enseguida nos señaló una imagen muy diminuta pegadadita a la base del saco. Como el Dr. sabía que mi esposo no estaba entendiendo nada le dijo: "van a ser papás!".
Fue un momento inexplicable, la sorpresa más grata y espectacular que he vivido. Así comenzó la historia de mi embarazo, el milagro de la vida.