Podríamos decir que muchas veces aun teniendo las herramientas, esa luz de la creatividad se nos apaga, y es normal, somos humanos, y muchas veces nuestro entorno puede jugar en contra, no colaborar, las circunstancias del día a día, la monotonía, pueden limitar esa capacidad creadora, no les ha pasado?, pero no se preocupen queridos Emeeseese Seguidores, no son los únicos, es algo que a todos nos puede afectar.

Pero ¿que podemos hacer para invocar esa energía creadora?

Es de eso que queremos hablar en esta oportunidad, para compartir algunos puntos que creemos podrían ser ayuda para todos ustedes, y para nosotros también, claro está.

La creatividad es algo que se cultiva poco a poco con todo lo que vemos, leemos, oímos, pero en buena medida hay algo de eso que nace con nosotros, ¿no son los niños muy creativos? es una buena herramienta con la que nacemos, contamos con ella de manera permanente pero aunque parezca absurdo, nuestra escolaridad la limita un poco, la llena de reglas que terminan por deteriorarla, aunque hay quienes se saltan de eso.

La formación académica es necesaria, obviamente, no podemos decir que no, estamos en un mundo en el que lo social nos obliga a tener cierto conocimiento mínimo, como saber leer, escribir, sacar cuentas, para poder desenvolvernos en ciertas áreas o ámbitos específicos.

Debemos usar la lectura para cultivar nuestra mente, pero que no necesariamente tiene que ser algo que nos coarte la imaginación, de hecho, lo lógico es que pueda ampliar la capacidad mental de imaginar cosas, de generarlas e integrarlas con otras ya conocidas.

Realmente es muy interesante conocer e funcionamiento de nuestra mente y de cómo va adquiriendo conocimiento que en algunos momentos de nuestra vida salen a relucir y nos permiten resolver situaciones que no esperábamos. Hacer de este proceso algo consciente, coordinado, de cierta manera planificado es una cualidad que podemos desarrollar y usarla a nuestro favor.

Difícilmente haya algún niño o niño al que no le guste un buen cuento, su mente vuela y se imagina cada aspecto de la narración. Pero, poco a poco esa capacidad se va limitando, a medida de que crecemos, en vez de ir en aumento, pero, así son las cosas, no hacemos más maduros y la creatividad muchas veces parece que va en contra de lo que es el desarrollo de la imaginación. Pero, eso es lo que necesitamos para permanentemente estar en actividad creativa, y que las ideas fluyan como un gran río, sin detenerse, tal como cuando eramos niños.

Para poder desarrollar lo que necesitamos en la creación debemos darnos la oportunidad de ese descanso mental necesario para que trabaje adecuadamente y puedan ser evocados no sólo recuerdos que podamos relacionar con lo que nos compete en un momento determinado, sino darnos y/o crearnos un espacio apto para esto.

Debemos conocer también cual es nuestro mejor momento del día para la creación, quizás un fuerte sol sea el idóneo, o probablemente un sitio oscuro en la madrugada. Esas son cosas que nos debemos preguntar, para ayudarnos en el proceso.

No hay fórmulas mágicas aplicables a cada uno de nosotros sin distinción, porque incluso lo que para alguno de nosotros puede ser perturbador, para otros es una norma.

Por ahora nos despedimos queridos Emeeseese Seguidores, con toda la intención de haber dejado algo importante en la mente de cada uno de nuestros lectores. No tenemos verdades absolutas, ni lo pretendemos, peor si es algo que puede ser una realidad para nosotros, muy probablemente también pueda ser una realidad en ustedes y ¿por qué no ? ayudarles indirectamente en la activación de esa creatividad o sencillamente permitir que entiendan algunas cosas en ustedes mismo.

Hasta una próxima oportunidad.

Gracias por leernos.