Esa formula mágica que tanto se nos recomienda hoy en día para vivir una vida más tranquila y que nos permite estar conscientes de las bendiciones que nos rodean, esa perfecta estrategia que nos permite transmutar los miedos y ansias en ideales y oportunas situaciones para poner a prueba nuestra conformidad y plenitud con nosotros mismos, recordando aquella (y para muchos infalible) frase que cita "Atraes lo que piensas", recordándonos por que no podemos pensar en nada que no sea beneficioso y haciéndonos reaccionar casi de inmediato en auto reproche y dándonos a nosotros mismos el mejor consejo que tenemos a la mano y de forma espontanea repetimos: "No pienses en cosas negativas" seguida de aquella famosa y esotérica frase que reza "atrae solo lo positivo...¡recuerda! el Universo conspira a nuestro favor..."(Seguido de un masaje en la sien y una sacudida de hombros) ¿Les ha pasado?

El Positivismo, al igual que todas las tendencias modernas que buscan crear estilos de vida más sanas, tranquilas y harmoniosas, se ha convertido en la mayor cura para la ansiedad en muchas personas, de igual forma se utiliza como una especie de regla no escrita para definir a una persona que estamos conociendo, sin embargo, mientras más "positivos" somos ante las distintas situaciones de la cotidianidad, más nos vamos despojando de una serie de medidas naturales de nuestro cuerpo, las cuales si se mantienen controladas, son hábitos ideales en cuanto al control de nuestras acciones y nos permiten prever una serie de posibles eventos desfavorables que pudiesen afectar de forma negativa nuestras actividades diarias, mas que simplemente "pensar en que todo saldrá bien y ya".

Es lógico pensar que para poder prevenir cualquier situación adversa debemos "pensar negativamente", sin embargo, hay que aclarar que la verdad es que estamos pensando de forma realista, no obstante, al estar muy absortos en "nuestro pensamiento positivo" podemos caer en una falsa paz o un ilusión errónea y generar expectativas favorables sin considerar todas las posibilidades, por lo que al ignorar "los contras" podemos incluso ser apáticos de nuestra propia situación creando una fragilidad increíble, ya que nunca nos preparamos para un posible acto desfavorable.

Vivir buscando lo positivo de cada situación es una herramienta perfecta para ayudarnos a lidiar y aprender de los problemas diarios de una forma eficaz, además que es la base de mantener ese preciado buen animo que tanto necesitamos a diario, porque como dicen los grandes pensadores, guías y gurús en materia de relaciones interpersonales "Recibimos lo que le damos al resto"; no obstante, tal y como advertí anteriormente, mantenernos únicamente con "el lado bueno de las cosas" puede generar que se generen una serie de debilidades en la capacidad de prepararnos ante situaciones adversas, asi como reducir nuestra capacidad para tratar de garantizarnos actuaciones más eficaces y en la toma de decisiones evitando la mayor cantidad de elementos que nos puedan ser desfavorables, Siendo entonces que, irónicamente, en muchas ocasiones pensar mal o ver los aspectos negativos también es positivo, ya que nos permite blindar nuestros proyectos y calcular de forma acertada el nivel de impacto tanto positivo como negativo de nuestras ideas.

Es ingenuo creer que todo nos saldrá bien siempre solo porque así lo deseamos, asi que no lo hagas.

¿¡Ah no!?

Regla de Oro

Recuerden: Hasta las bendiciones en exceso se pueden convertir en veneno.