In my life I always looked for my vocation, since I was a kid I thought how would it be when I grew up. In the midst of a quiet adolescence, the interest in learning to play guitar arose, but in the middle of the road a feeling was born when listening to one of my classmates play the double bass, it was incessant, it was the low sound of the bass strings that was arising in me, for the first time I felt the creation of the vocation in me. It can not be anything else I thought and I must say, definitely she found me. "Bass player!" I exclaimed, visualizing the thick strings of this instrument being played by my hands.
However, time progressed, "music can not be everything in your life" some said with good reason and on the other hand listening to other voices that repeated "you must study something else."
Even without some vocation at the moment the music had to wait and that was how I entered the university world, without success.
Bringing the frustration to a new level demonstrating in itself that you can not live from music in a country where hardly a well-known musician can enjoy his vocation. The search for a good profession and jobs was constant and that's the way it should be. No doubt choosing became more and more worrisome and that's how I just decided, simply to do what I really liked, I wanted to be "engineer?" I asked myself, "Doctor, architect, psychologist, teacher? What do I do? "Was the question every day. , the announcement in a social network about a culinary art academy caught my attention. But when entering through the doors of the academy to "ask for information" the news was not encouraging. Factors such as economics, time and skills hover in your mind "I want to be a chef!" I said to myself.
I had found my vocation but now I had to overcome not only the problems against me, but also my own refusal to face the negatives of my environment and rise when everything is uphill.
With hard work, hard work, daily effort, determination and a lot of discipline I managed to achieve and practice, enjoying and with a lot of passion what maybe many did not want to see.
Personal fulfillment goes beyond having the title of the best university in the world on the wall (this is worth a lot) but it is also worth being able to make your profession the most important and above all to be able to love your day to day life.
I got used to living between ropes and knives, taking music to the kitchen and making these two passions a perfect cooking and harmony and bring happiness to the table of millions and the ears of each individual who has the opportunity to have these two experiences in one place.
En mi vida siempre busque mi vocación, desde chico pensaba como seria cuando creciera.. En medio de una adolescencia tranquila surgió en mí el interés de aprender a tocar guitarra, sin embargo en medio del camino un sentimiento iba naciendo al escuchar a uno de mis compañeros tocar el contrabajo, era incesante, era el sonido grave de las cuerdas de bajo que iba surgiendo en mí, por primera vez sentí la creación de la vocación en mí. No puede ser otra cosa pensé y debo decir,definitivamente ella me encontró a mí. “¡Bajista!” exclame, visualizando las gruesas cuerdas de este instrumento ser tocadas por mis manos.
Sin embargo, el tiempo avanzó, “la música no puede ser todo en tu vida” decían algunos con mucha razón y por otra parte escuchando otras voces que me repetían “debes estudiar algo más.”
Aún sin alguna vocación por el momento la música debía esperar y fue asi como me adentre en el mundo universitario, sin éxito.
Llevando la frustración a un nuevo nivel demostrando en sí que no se puede vivir de la música en un país donde a duras penas un músico reconocido puede disfrutar su vocación. La búsqueda de una buena profesión y empleos era constante y asi debia ser. Sin duda escoger se hacia cada vez mas preocuopante y fue asi como solo decidi,simplemente realizar lo que de verdad me agradara, quería ser “¿ingeniero?” Me preguntaba, “¿Médico, arquitecto, psicólogo, maestro? ¿Qué hago?” era la pregunta de cada día a día. , el anuncio en una red social acerca de una academia de arte culinario me llamó la atención. Pero al entrar por las puertas de la academia para “pedir información” las noticias no fueron nada alentadoras. Factores como la economía, tiempo y capacidades rondan tu mente “¡quiero ser chef!” me decía a mí mismo; había encontrado mi vocación pero ahora debía vencer no solo los problemas en mi contra, sino también mi propia negación a la hora de afrontar las negativas de mi entorno y subir cuando todo está cuesta arriba.
Con trabajo duro, muy duro, esfuerzo diario, determinación y mucha disciplina logre concretar y ejercer, disfrutando y con mucha pasión lo que quizá muchos no querían ver.
La realización personal va más allá de tener el título de la mejor universidad del mundo en la pared (esto vale muchísimo) pero también vale el poder hacer de tu profesion lo mas importante y sobretodo poder amar tu dia a dia.
Me acostumbré a vivir entre cuerdas y cuchillos, llevando la música a la cocina y haciendo de estas dos pasiones una perfecta coccion y armonia y lograr llevar la felicidad a la mesa de millones y a los oídos de cada individuo que tenga la oportunidad de tener estas dos experiencias en un solo lugar.