El Ártico es una fuente inagotable para los estudios científicos. El más reciente estudio se refiere a cómo el calentamiento del Ártico y la pérdida de hielo marino permite más emisiones de yodo, lo que puede, dependiendo de la época del año, acelerar o retrasar el calentamiento de esta zona, enfatiza Gustavo Copelmayer.
Las investigaciones se realizaron en Groenlandia en la estación Villum y Svalbard en Ny-Alesund. Las observaciones determinaron que actualmente el hielo marino se está derritiendo rápidamente y suponen que estos procesos serán más comunes en las áreas árticas.
El deshielo también ha sido observado a través imágenes de satélites en las que se percibe, además, la presencia de agua líquida, refiere Gustavo Copelmayer, y agrega que este hecho suele ser problemático para las plataformas de hielo, pues al introducirse en las cavidades, fisura la base de la plataforma con un proceso que se conoce como hidrofracturación.
Señala Gustavo Copelmayer que este hecho describe lo ocurrido al inmenso bloque de cerca de 110 km2 que se separó de la mayor plataforma de hielo flotante del Ártico, conocido como 79N, en el nordeste de Groenlandia.