Compartir con nuestros hijos

Amo a mi hijo profundamente y siempre hago lo mejor que puedo para ser buena madre y un bien ejemplo para el.

Mi amorcito tiene 7 años y todo este tiempo a sido de altos y bajos en muchos aspectos de nuestra vida como familia, crecí en un hogar donde siempre se decía que la familia debe estar unida más sin embargo sólo eran palabras y no hechos en realidad, aunque estábamos juntos (recuerdos de mi infancia) nunca había un ambiente de armonia, ni atenciones genuinas ni nada de esa cosas amorosas que todos los niños piden a gritos a sus padres. Ahora en mi adultez cuando supe que estaba embarazada fue una emoción y sensacion muy extraña de poder definir y explicar pero si te puedo decir que me invadian muchas dudas y preguntas acerca de cómo criar a mi retoño y guiarlo para su mejor bienestar, siento que no tuve respuestas y a medida que iba pasando el tiempo solo podía darle a mi hijo en cierto modo lo que a mí me enseñaron tratando de modificarlo a mi manera de ver la vida.

Hoy creo en lo que puedo cambiar en mí y saber con certeza de que he encontrado un camino guiado, de cómo llevar una vida más serena, más amorosa, más próspera con mi hijo y también mi entorno. Siempre he puesto buena cara ante las adversidades y siempre he sido trabajadora y buscadora de verdades ocultas, creo que ésta a sido la clave de mi crecimiento interno y mi apertura de conciencia y consciencia.

Recomiendo a todos los padres con hijos de cualquier edad el libro: LOS 5 LENGUAJES DEL AMOR DE LOS NIÑOS.
Sus autores: Gary Chapman y Ross Cambell, M.D