Encuesta revela relaciones más intimas
En Colombia, diferentes entidades gubernamentales han realizado varias investigaciones sobre diferentes aspectos de la conducta sexual.
Una de ella es la encuesta realizada en 1993 por el seguro social, la asociación pro bienestar de la familia colombiana (Pro-familia) y el instituto nacional de cancerología, que en uno de sus tomos analiza la sexualidad y los comportamientos de riesgo para la salud en los adolescentes.
El trabajo, titulado encuesta sobre conocimientos, actitudes, creencias y practicas relacionadas con enfermedades de transmisión sexual, sida; enfermedades, fue realizado entre una población adulta de 18 a 69 años y entre adolescentes de 12 a 17 años, con un total de 5.026 entrevistas a hombres, 6,949 a mujeres y 3.105 adolescentes de ambos sexos.
En primera instancia, entre los adolescentes encuestados se detectó que adquieren conocimiento sobre sexualidad especialmente de sus padres. La madre ocupa el primer lugar entre las personas que consultan cuando tienen dudas (47 por ciento, contra veinte por ciento de los hombres). En segundo lugar, están los amigos (16 por ciento) y en tercer el padre (11 por ciento).
Los hermanos y profesores aparecen casi empatados con 6.1 y 6 por ciento respectivamente, 3.2 consulta con otros familiares, 1.3 con personas mayores, 0.7 por ciento con el medico y 0.1 con el sacerdote. El 21 por ciento dijo que no consultaba a nadie.
También se concluyó que, a menor edad, consultan mas con la madre o el padre, en tanto que, a mayor edad, se consulta mas con los amigos, los hermanos mayores o con los profesores.
Con la encuesta se determino, igualmente, que el 17 por ciento de los adolescentes encuestados han tenido relaciones sexuales (26 por ciento de los muchachos 8 por ciento de las mujeres). Se presenta que, a mayor edad, mayor es la proporción de adolescentes que han tenido relaciones sexuales, aumentando desde 2 por ciento en los de 12 años hasta 44 por ciento entre los de 17.
Los investigadores concluyen en su informe final que del total de muchachos que han tenido relaciones sexuales, el 68.5 por ciento son -precoces- (15-17 años). De las niñas que han tenido relaciones sexuales, las muy precoces son el 38.2 por ciento.
En el caso del auto-erotismo, los adolescentes tienen sus reservas. Según la encuesta, los muchachos de ambos sexos que no han iniciado su vida sexual, son los que menos saben que es la masturbación, o no responden a la pregunta. Que -es un acto normal que no produce daño, una forma de adquirir satisfacción sexual, o, simplemente, una manifestación de la sexualidad-.
Pero también ellos, especialmente los mas precoces, consideran los aspectos negativos: -algo que debe evitarse, que produce culpabilidad o un acto pecaminoso-. Las mujeres que han tenido relaciones sexuales piensan mas en los aspectos negativos que en los positivos de la masturbación.
De otra parte, los adolescentes que ya han tenido relaciones sexuales están mas de acuerdo que los otros, con que:
- Los hombres deben tener relaciones antes del matrimonio.
- Las relaciones sexuales son una forma de ganar independencia de los padres.
- Se deben tener relaciones con mas de una persona.
- Se pueden tener relaciones sexuales sin que exista relación afectiva.
Pero no están muy de acuerdo sobre la necesidad de que la mujer llegue virgen al matrimonio. Ellas, por su parte, no están muy de acuerdo con que se tengan relaciones sin amor y con que la mujer llegue virgen al matrimonio.
Una de las variables que mas preocupa a la sociedad es la edad en que empiezan a tener relaciones sexuales los adolescentes. La encuesta concluyo que la edad promedio para la primera relación sexual es de 13.4 años para los hombres, y 14.8 para las mujeres, en promedio 13.7 años. Este numero, sin embargo, aumenta con la edad y con el nivel educativo. Para las adolescentes analfabeta es de 13.4 años, mientras que para los que tienen secundaria completa es de 16.1.
¿CON QUIÉN?
De acuerdo con lo que los investigadores pudieron concluir de los datos emitidos por la encuesta, la primera relación de los muchachos fue con una amiga (49 por ciento) o con la novia (35 por ciento); en tercer lugar, están las prostitutas (7 por ciento), en cuarto una desconocida (4.5 por ciento) y en el quinto una familiar (4.4 por ciento).
Por su parte, las mujeres nombran en primer lugar al novio (79 por ciento), en segundo al esposo o compañero (10 por ciento), y en tercer a un amigo (6 por ciento); en 1.8 por ciento de los casos fue con un familiar y en 2.7 por ciento con un desconocido.
Los analistas de la encuesta aseguran que ha habido cambios en las conductas sexuales de las generaciones. Así, los adolescentes tienen ahora mas relaciones con la novia (35 contra 24 por ciento entre los adultos) y menos con prostitutas (7 contra 15 por ciento).
También las adolescentes presentan mayores diferencias con las adultas -precoces-, nombrando más las adolescentes al novio (79 contra 49 por ciento entre las adultas) y menos al esposo o compañero (10 contra 42 por ciento de las adultas), como la primera persona con la que tuvieron una relación sexual.
Las razones para haber tenido esa primera relación cambian según el sexo. Para los hombres la principal razón fue el deseo sexual (29.1), en tanto que para las mujeres fue el amor (66.6 por ciento). Ellos actuaron en un 23.9 de los casos por amor.
Las otras dos principales variables son la curiosidad y el deseo de adquirir experiencia. Los hombres actuaron en un 25.5 por ciento por curiosidad y, en un 9.2 por ciento de los casos, por adquirir experiencia. A ellas sin embargo no les interesa esta variable, y después de un 7.5 por ciento de las que tuvieron como razón la curiosidad, sigue un 6.2 que afirma haber tenido su primera relación sexual contra su voluntad.
Según la encuesta, otros aspectos que influyen en los jóvenes son: para el 4.5 por ciento de las mujeres y 2.4 por ciento de los hombres fue importante la presión de sus novios; los hombres sintieron más la presión de los amigos que ellas (0.5 por ciento contra 4.1). el 4.6 por ciento de las mujeres dicen que fue por cuestión de circunstancias, variable que solo nombra el 2.6 por ciento de los muchachos.