Amor fugaz

Mi amor fugaz inició en mis 15 años, con un amigo y compañero del bachillerato, creo se me notaba mucho que me gustaba, (era muy guapo) es mas yo sentía (o mis hormonas revueltas) que lo amaba, las mariposas revolotearon por primera vez en mi estomago, pero además de ser amigos él tenía novia…y en la misma institución, de manera que sufría cada recreo cuando iba a encontrarse con ella. Pero sucedió que unos pocos días antes de mis 15 primaveras terminó con su enamorada…comenzó a fijarse en mi de otra forma (claro, yo quería disimularlo pero repito... se me notaba).

_{Imagen propia en mis 15 años.}

Nos hicimos “noviecitos” el día de la fiesta, bailamos toda la noche; “Si me dejas ahora” del grupo Chicago. Lo recuerdo con ternura, mi primer beso…beso. Fue totalmente tierno y respetuoso conmigo, nos tratábamos con un afecto especial ya que además de la atracción entre nosotros había amistad de muchos años. Éramos un grupo de 5 inseparables, de casa en casa de las chicas que fuimos tres (actualmente mis comadres), juntos al cine, al Bowling, a estudiar, siempre con la familias.

Gracias a él aprendí a tener una relación basada en el respeto mutuo, en amistad, no quería hacerme daño ya él tenía 18 años, aunque yo era muy madura se sentía mal creo que siempre estuvo de verdad enamorado de la otra y me tomó como su buena oportunidad de olvidarle…y casi lo logra, pero un día ya cercano a la graduación de bachiller, apenas duramos tres meses, ella se apareció estando conmigo le entregó una carta y desde allí todo cambió. Fue muy sincero, me pidió continuar con la amistad, por supuesto que me negué, jamás volví a hablarle, ni a verle, hasta diez años después nos encontramos lavando nuestros respectivos carros y conversamos, nos reímos y lo tomamos como una anécdota muy nuestra y afectiva.

Es fugaz cuando dura poco, pero como las estrellas deja una estela dentro de ti de: aprendizaje, buen recuerdo, gratos momentos y como era mi primer “amor” a esa edad uno cree morirse pero no se muere a las dos semanas se me había pasado, comencé a recordarlo con una ternura infinita la misma que le tengo hoy…