Acaba de finalizar la séptima semana de la tercera temporada de la Steemit Crypto Academy, y aunque el número de participantes disminuyó significativamente con respecto a las semanas anteriores, deseo agradecerles a todos y cada uno de ellos por su interés.

En esta ocasión, continuamos con el estudio, al igual que las semanas anteriores, de las herramientas mas comunes que nos ofrece el análisis técnico para identificar tendencias y predecir con cierto nivel de certeza el comportamiento de los precios en el mercado, para lo cual, nos iniciamos en el estudio de los retrocesos de Fibonacci.

Leonardo de Pisa, mejor conocido por su apodo de Fibonacci, fué un matemático italiano de principios del Siglo XIII, responsable de la introducción del sistema de numeración indo-arábigo, que conoció en su niñez y adolescencia cuando acompañaba a su padre en el noreste africano, en el continente europeo donde predominaba el uso del sistema de numeración romano.

Las contribuciones de Fibonacci en el campo de las matemáticas son innumerables, sin embargo, pasaría a la historia por la sucesión numérica que lleva su nombre, y la cual ha encontrado un amplio uso, no solo en el campo de las matemáticas, sinó también en otras áreas del conocimiento humano, y que ha sido incorporado como una herramienta para el análisis de los mercados de activos, incluyendo las criptomonedas.

Curiosamente, una relación observada entre las longitudes de dos segmentos de una línea recta, y de la cual existen registros que datan de la antigua Grecia, daría origen a un número conocido como Proporción Aurea, Número Aureo o Proporción Divina, que se encuentra en la naturaleza en las formaciones de las galaxias, en los patrones de distribución de hojas, pétalos o semillas de algunos arbustos, en el cuerpo humano, e incluso en la arquitectura y las artes, y que se encuentra asociado con la belleza y que algunos le atribuyen cualidades divinas o místicas, y que está íntimamente ligada con la sucesión de Fibonacci.

Como ha sido habitual, existe un gran número de participantes que hacen gala de sus conocimientos en el área, con excelentes publicaciones, fruto de un verdadero esfuerzo. Lamentablemente, por otro lado y como era de esperarse, también hay quienes se contentan con publicaciones mediocres, probablemente por no leer detenidamente las indicaciones o por apresurarse en la redacción de su artículo, aunque tal vez existan quienes solo buscan obtener la nota mínima aprobatoria para optar a las recompensas.

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