Hola mi estimada gente de venezolanos steem. Hoy acudiendo a la convocatoria de nuestra amiga @eudisdiaz quiero compartirles uno de mis juegos favorito de la infancia.

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El juego del Pañuelo

Evocando los momentos de mi infancia he podido dar con algunos juegos que realizábamos en aquellos tiempos y pude darme cuenta que fueron muchos, como por el ejemplo el juego con los rines o cauchos de bicicletas, el juego de trompos y metras, entre otros. Pero quise seleccionar para compartir con ustedes un juego de equipo llamado el pañuelo. Recuerdo que era un juego donde todos participábamos tanto las niñas como los niños sin límite de jugadores.

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Este juego consistía en enumerar a cada miembro de los equipos quienes se ubicaban de extremo a extremos y en el medio una persona era la responsable de llamar por número para que estos tomaran el pañuelo y regresaran a su puesto sin dejarse tocar por el adversario.

Por ejemplo si llamaban al número cinco solo los niños con ese número de ambos equipos debían acercarse a la persona que tenía el pañuelo, tomarlo estratégicamente sin dejarse tocar y correr de regreso a su equipo.

Era un juego emocionante e involucraba a todos y esto era lo que más me gustaba, porque al formar equipo aprendíamos a trabajar en equipo y a utilizar nuestra creatividad inventándonos estrategias para alcanzar la victoria.

En este juego siempre que me tocaba correr lograba anotar puntos para mi equipo porque gracias a mi altura y a la potencia que le ponía a mi carrera, llegaba primero donde estaba el pañuelo y regresaba sin mayor dificultad. A decir verdad este juego me reforzaba mi autoestima porque a la hora de escoger a los participantes para formar los equipos todos querían que yo quedase en el suyo.

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Lo interesante de esto es que este juego luego me ha sido muy útil en mi espacio de trabajo ya que en alguna oportunidad a los adolescentes y jóvenes que le imparto clases se los he enseñado y ha servido para dedicar un día de entretenimiento sano y a la vez proporcionarles herramientas para conocerse y trabajar en equipo.

Una anécdota que me paso en mi infancia jugando "El pañuelo" fue que llamaron al número siete que era mi número, entonces corrí, tomé el pañuelo y seguí corriendo con toda la fuerza para que mi contendiente no me alcanzará, pero cuando me di cuenta estaba del lado equivocado con el equipo adversario. Como no me gustaba perder me inventé y que la regla decía que podía anotar punto de esa manera. Lo cierto es que después de tanta discusión aceptaron esa nueva norma y valió mi punto.

Como reflexión final quisiera decir que es importante dar espacios de recreación al aire libre a nuestros muchachos como lo hicimos nosotros en nuestros tiempos y no dejar que solo los videojuegos, redes u otros medios de diversión ocupen el tiempo de ocio de ellos.

Considero relevante el rescate de muchos juegos tradicionales que con el paso de los años han quedado atrás pero que de darse a conocer serían un punto de atención y diversión para nuestra población infantil.