Es un privilegio para mi participar de esta final, donde cada semana se vieron trabajos maravillosos, quedando para esta final, sólo los mencionados en la publicación promocional del concurso. En mi caso, para hacer mi entrada al concurso hice una historia partiendo de la obra de la persistencia de la memoria de Salvador Dali.

Para la elaboración de mi historia, tuve que investigar primero el significado de esta maravillosa obra y lo que el autor quiso reflejar con cada elemento plasmado en su obra de Surrealismo. Ya más clara y con toda la información necesaria, comencé a desarrollar mi historia poniendo de manifiesto mi imaginación y siguiendo una secuencia de los puntos más relevantes de esta obra.

Había una vez, en un lugar lejano en los bosques del Amazona, se encontraba una gran colonia de hormigas Bala, se les llaman así por el dolor que dejan cuando pican a un ser vivo, comparado al dolor que provoca un impacto de bala. Este grupo de hormigas, sabían cuál era su medio de defensa ante sus depredadores y se aprovechaban de esa cualidad, para correr cualquier tipo de riesgo que tenían mientras trabajaban para conseguir satisfacer las necesidades del hormiguero y por supuesto de la hormiga Reina.

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Un buen día, salió la acostumbrada marcha de las hormigas obreras, para ejercer su función de trabajar sin cesar y encontrar la comida suficiente, para alimentar a todos los miembros de ese gran hormiguero. Por lo general, para este tipo de labor se contaba con la presencia de la hormiga guía, quien llevaba al resto de las obreras por lugares seguros para recolectar la comida.

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Pero ese día algo muy peculiar pasó, que la hormiga guía pidió ayuda a una de las hormigas cortadoras que se llamaba Cori, siendo esta una de las mejores hormigas con la memoria visual del camino y la posición del sol para regresar a su hormiguero.

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Una vez, formado el grupo de obreras y algunas cortadoras, comenzaron su recorrido para cumplir cada una con sus funciones establecidas. Caminaron por largo rato, atravesando montañas, troncos y no veían nada de comida. Se detuvieron un rato a descansar y Cori envió una hormiga exploradora llamada Dora, para que evaluara el sitio. Esta exploradora fue a visualizar los alrededores y encontró unas pequeñas hojas y migas de pan.

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Salió corriendo para dar la noticia y llegó gritando a la concentración

Dora: ¡Cori! Cori! Encontré algo muy bueno
Cori contestó: Dime exploradora que encontraste?
Dora: Unas buenas hojas y unas migas de pan
Cori: ¿Solo migas? Tanta alarma para tan poco
Dora: ¡Bueno Si, pero creo que le gustará a la Reina.
Cori un poco molesto contesta: ¡No! No perderemos el tiempo con tan poco.
Dora: Estas seguro? Porque está calentando el sol, que hasta los relojes humanos se derriten.
Cori: Si estoy seguro, subiré al árbol para ver que hay al Oeste.

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Entonces Cori subió a un árbol muy alto, para tener mayor visión y hacer uso de una de sus cualidades. Miró todo y a lo lejos vio un rayo de luz muy brillante, que le llamó mucho la atención y dejándose llevar por su buena intuición, decidió encaminar toda la caravana hasta ese lugar.

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Cori gritó muy emocionado a los compañeros
Cori: ¡Bingo! Conseguí un buen tesoro para la Reina. ¡Vamos aún tenemos tiempo de ir y regresar!
En esto Dora replica ante la orden de la hormiga guía
Dora: Yo opino que podemos regresar con las migas y mañana iremos por ese tesoro, porque el sol está bajando muy rápido.
Ya enfurecido contesta Cori: ¡No regresaremos! Vamos al Oeste, según mi experiencia estamos muy cerca.
Dora acepta y dice: OK, pero colocaremos señales con piedras para saber esta nueva ruta y regresar sin problemas.
No muy de acuerdo con Dora contesta: ¿Qué pasó no confías en mí?
Dora: Si confío en ti, pero esa ruta sale de nuestro perímetro permitido.
Cori: No importa, me responsabilizaré por eso ante la reina.

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Todos obedientes y confiando en la buena memoria visual de Cori, emprendieron su marcha al Oeste sin colocar señales en su recorrido. Así pasaron varias horas de caminata, hasta que vieron que la luz brillante estaba cerca, pero cada vez que se acercaban, el calor se sentía mucho más. Sin embargo, siguieron con el mismo ritmo, para llegar al objetivo.

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Una vez que llegaron al sitio, se encontraron con un bello paisaje con grande rocas y una línea azul intenso que dividía el cielo con un amplio mar. Pero Cori emocionado con la luz brillante se acercó al tesoro, sin percatarse que el terreno no era fuerte, ya que era un material arenoso.

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Igualmente, siguió y llevó al restos de las hormigas al lugar brillante, al que le llamo tesoro. Pues, su este resultó que era un círculo de metal, que con los rayos solares daba ese efecto luminoso.

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En eso respondió Dora:
Dora: ¿Qué es eso?
Cori responde: No lo sé, pero vamos a cercarnos más, ¡allí seguro hay comida sustanciosa para la colonia!

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Todos se acercaron y se montaron encima de ese círculo, pero el calor estaba muy intenso que sentían que se estaban derritiendo. Con esa situación tan calurosa, el resto de las hormigas se pusieron muy ansiosas, que caminaban de un lugar a otro, porque no querían morir así.

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De repente los sorprendió una gran columna de agua, que arrastró este metal conjuntamente con ellos, pero otras hormigas cayeron en la arena fangosa, que se había mojado por esta fuerte ola.

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Cori miró a su alrededor y entró en pánico que gritó:

¿Y ahora qué hago?

Y quedó paralizado de miedo.

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Mientras, que Dora viendo que las hormigas obreras estaban en peligro, tomó una actitud diferente y decidió armarse de valor, para saltar sobre una máscara plástica que se encontraba en la arena.

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Entonces gritó despavorida: ¡Vamos chicos salten aquí!

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Todos comenzaron a trabajar en equipo, formándose como una cadena, donde Dora la encabezaba para ayudar al resto de las hormigas. Al cabo de un rato, lograron sujetarse fuertemente de esta mascara, esperando que viniera otra vez la ola, para que esta saliera a flote y llevarlos a un terreno seguro.

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Mientras tanto, Dora muy pensativa sabía que la decisión que tomaron fue todo un riesgo, pero fue la única salida, porque estaba al corriente que ese círculo metálico era un reloj que usaban los humanos, que al calentarse con el sol, podían morir todos quemados o por el contrario, si volvía la ola podrían morir ahogados, ya que el reloj se hundiría en el fondo del mar.

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Lo cierto es que la decisión de Dora, fue la más acertada. Sin embargo, el tiempo que estuvieron encima de esa mascara resultó interminable para ellos, solo veían como el sol seguía cayendo y eso los ponían más nerviosos. Pues sin importarle esa situación, se mantuvieron positivas amarradas unas con otras para seguir con vida.

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Luego, ciertamente ocurrió lo que DORA esperaba, vino la ola y arrastró la máscara plástica hasta un lugar seguro, donde inmediatamente se bajaron y cuando Dora se disponía a guiar al grupo para volver al hormiguero, replicó nuevamente Cori para tomar el liderazgo del retorno. Avanzaron unos pocos metros, sin darse cuenta que estaban dando vueltas por el mismo sitio.

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Dora notó la situación y preguntó: ¿Cori olvidaste el camino?
Y este contesta con voz fuerte: No creo, yo soy muy bueno con mi memoria, dame un momento para recordar.
Dora: ¿Pero no te has dado cuenta?
Cori: ¿A qué te refieres?
Dora: Estamos en un camino diferente, no tiene nada que ver con tu memoria.
Cori: ¡No puede ser!
Dora: Mejor buscamos un refugio porque ya caerá la noche y mañana con el sol buscaremos retornar.

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Cori muy desilusionado aceptó la recomendación y buscaron refugiarse debajo de un hongo. Pero estuvo toda la noche buscando en su memoria algo que le mostrara el camino al hormiguero.
Se hizo de día y como un rayo de luz le vinieron los recuerdos de ese lugar, que estuvo con otro grupo de expedición. Le pidió a Dora que lo ayudará a dirigir la caravana y que él solo colaboraría con su memoria visual.

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Finalmente, con el trabajo en equipo lograron encontrar el hormiguero y Cori acepto su error ante la Reina, que estaba muy preocupada por sus hormigas, sin importar que hayan regresado con las manos vacías.

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Moraleja: Más vale pájaro en mano que cien volando

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Este refrán nos enseña que vale más lo que está seguro, a pesar de tener menos valor, que algo que es mejor pero no es seguro, de modo que desaconseja cambiar lo cierto por lo incierto.

Video relatando mi bella historia.