Saludos queridos amigos de Steemit Writing & Reviews es muy grato para mi participar en este genial concurso que trajo recuerdos muy bonitos sobre mi cuento preferido, además quiero agradecer la incitativa de @belenguerra, @writingnreviews & @fendit, muchas gracias.

Dicen que la mentira tiene patas cortas, yo le agregaría "y narices largas" pues eso aprendí desde niña a través de un cuento infantil que mi madre solía leerme ¡Pinocho!.

Pinocho es la historia de un muñeco de madera que quería ser humano y para poder lograrlo tenía que aprender a obedecer, ser honesto y sincero. Creo que en todos los hogares del mundo al menos durante los años 70 y 90 conocieron o escucharon sobre Pinocho, ya que era el ejemplo que siempre usaban nuestros padres para que dijéramos la verdad porque si no lo hacíamos nuestra nariz crecería como la de él.

Esa era la referencia o amenaza cuando nos querían enseñar el valor de la honestidad, un valor que hace falta en estos tiempos, especialmente para quienes toman la desobediencia como modelo a seguir.

A la mentira se le ha catalogado de muchas maneras, se le da color "Mentira blanca" se le ha dado tamaño "Mentira corta" se le ha eximido "Mentira piadosa" y así muchísimas otras características y definiciones, pero a la larga, no deja de ser lo que es ¡Una mentira!.

Que distinto sería el mundo si no fuésemos como Pinocho, si no escogiéramos la mentira para lograr lo que queremos, si no la verdad ante todo.

Y ¿Qué tal si dejamos de ser pinocho? ¿Qué tal si nos rodeamos más de amigos como Pepe grillo que intenten corregir nuestras malas acciones y no sean nuestros cómplices?

La historia de Pinocho me acompañó toda mi vida y seguirá acompañándome a lo largo de la educación que le daré a mis hijos.

Es una gran aventura, cargada de importantes valores como la obediencia, el amor y el respeto por la familia, por la verdad. Para quien no lo conoce, vale la pena leerla y poner en práctica su moraleja.