Nuevo concurso: Mi experiencia como cuidador | Porque ellos también importan

Un saludo a todos los miembros Steemians, Parceras, Parceros, que se detengan a leer por unos minutos:

Mi publicación de hoy estará enfocada en la invitación que realiza @franyeligonzalez en la comunidad 'Colombia-Original', en donde nos anima a desarrollar un tema relacionado con los custodios de la salud.

Aquí la convocatoria🢘

INTRODUCCIÓN

En el área de atención médica existe un grupo de personas notables que dedican sus vidas al brindar bienestar, comodidad en los enfermos y familiares, están presentes para acompañar durante el duro proceso que implica la enfermedad; su compromiso, compasión y experiencia los convierten en los héroes anónimos al trabajar incansablemente por otorgar la mejor atención posible.

Como paciente crónica, puedo decir que son una columna vertebral en el restablecimiento, son panaceas en la grieta que existe entre la salud y el quebranto; para mí, aparte de los médicos, tanto auxiliares de enfermería, como enfermeras, personal de limpieza, personal del área de nutrición, personal de seguridad intra hospitalaria y de consulta externa, son parte de esos ángeles que nos hacen la vida un poco más amena cuando estamos debilitados, yo lo he experimentado, he palpado su labor organizada. No han estado en el filo de mi cama todo el tiempo, a algunos ni siquiera los he conocido, pero sé que a través de la comida, a través de la protección en las puertas de entrada y salida, nos hacen sentir su presencia y eso brinda confianza.

¿Alguna vez has tenido bajo tu cargo el cuidado de otra persona? ¿Por qué? ¿Cuál fue el motivo?

Sí, he tenido a mi cargo el cuidado de una persona. Un año después de mi tiroidectomía y el tratamiento con yodo radiactivo, mi esposo enfermó. Le hicieron unos estudios y detectaron cálculos biliares, pero que ya estaban molestando mucho, a veces con el agua que ingería sentía molestias y no le permitía trabajar con normalidad, así que la solución más oportuna, según el médico, fue realizar una cirugía para extraer su vesícula biliar.

Se realizó el procedimiento por laparoscopía, todo salió bien y al día siguiente le dieron el alta médica porque el cirujano dijo que los pacientes se restablecen más rápido en casa. Antes de salir del hospital me entregaron una lista enorme de cuidados paliativos que él debía tener, entonces me sugirió que lo mejor sería contratar los servicios de una enfermera, sin embargo, cuando nos casamos, algo que dijo quien ofició la ceremonia fue "en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte los separe".

_{Fuente de la Imagen Pixabay}

Cuando estuve delicada de salud, cuando tengo mis bajas de calcio en sangre, fue, es mi esposo quien se hizo y se hace cargo de mí en casa con los cuidados paliativos. En el pasado, no dormía solo de pensar que el drenaje que yo tenía conectado en el cuello podía moverse durante el sueño; ahora, está pendiente por si en algún momento determinado vuelven las hipocalcemias, pero lo superamos juntos.

¿Cómo no retribuir en algo su cuidado?, por supuesto que por amor se realizan las acciones, nada debe ser impuesto, y más quienes somos creyentes que hay un Dios en el Cielo y que la Biblia nos dice que si recibimos un favor de gracia, así también lo hemos de dar de gracia... lo creo, lo vivo, lo acciono.

Estuve pendiente de su dieta, lo ayudaba a llegar al baño para que se duchara, controlaba sus medicamentos y cuando tenía un poco más de dolor del habitual solía tocar algo en el piano para que se quedara dormido mientras se relajaba. Una vez más, lo superamos juntos.

¿Cómo te sentiste cuando enfrentaste esa situación? ¿Contabas con lo necesario para sobrellevar ese momento?

_{Fuente de la Imagen Unsplash}

Cuando vemos al ser amado en una condición vulnerable, cualquiera sea esta, nos quebrantamos. A pesar de que mi esposo no es una persona quejosa, no es una persona dramática como a veces los memes en internet circulan acerca de la dramaturgia masculina, a mí me dolía verlo enfermo, sus ojos apagados, sin actividad diaria, algo molesto y pálido en exageración cuando le servía la comida.

Contaba con el apoyo necesario, con las medicinas, con el dinero, con la familia y amigos porque se pasaban a visitarlo cuando lo consideraban, pero eso no quitaba de mí la angustia de verlo decaído porque a la final soy yo quien duerme con él y lo conozco, pero salimos adelante, juntos hasta cuando le dieron le alta definitiva.

¿Psicológicamente sientes que te afectó o te afecta en caso tal de que lo estés viviendo actualmente? ¿Por qué?

_{Fuente de la Imagen Pixabay}

Psicológicamente sí me afectó, es que me asusté cuando a los tres días de su cirugía vomitó y se desmayó en el baño. Tuve que llamar a mis familiares para que me ayuden con el traslado al hospital porque acá las ambulancias llegan al día siguiente que se solicita, hay mucha burocracia tristemente. Creo que por esa razón fue que me quedé pensando en que podría pasarle algo más serio si no lo dejaban interno, pero los médicos me explicaron las razones y volvimos a casa ese mismo día, en la noche, claro, aunque me aseguraron que no pasaría de nuevo, en mi mente estaba ese miedo al hecho de que cabía una remota posibilidad por la que tuviéramos que llegar al servicio de urgencias, de suma urgencia.

¿Piensas que la salud del cuidador también es importante? ¿Cuáles son tus consejos para mantenernos estables ante una situación como esta?

_{Fuente de la Imagen Rawpixel}

Sí, pienso que sí, tanto de manera física como emocional porque somos biológicos, psicológicos y sociales, cuando una de estas tres formas del ser falla, no hay equilibrio y viene la descompensación. A veces las personas que ven desde fuera se crean imágenes equivocadas con respecto al personal de salud, como por ejemplo, que no tienen corazón, no tienen emociones, que todo lo aguantan, que todo lo resisten o soportan, pero pasa que, aunque como cátedra en la formación se pueda recibir Ética y bases de Psicología, un cuidador de la salud no deja de ser un mortal.

Por lo que viví como cuidadora, por lo que he visto en mi entorno, creo que entre los consejos más elementales que puedo escribir están:

1. Si se sienten muy abrumados por la situación, no se callen, más bien háblenlo, no con la persona a quien están cuidando, sino con un especialista, con un amigo de confianza, en un grupo de apoyo.

2. Practiquen técnicas para librar el estrés: caminar en los tiempos de descanso, hacer ejercicio moderado para evitar el sedentarismo tanto mental como físico, mascotas, instrumentos musicales, cocina, costura, lectura están entre mis opcionadas.

3. Busquen soporte extra: esto, porque al ser humanos no somos superhéroes y requerimos de ayuda para enfrentar situaciones, en el caso de los cuidados a los enfermos en casa, para eso están familiares, amigos verdaderos que estarán dispuestos a por lo menos brindar una sonrisa y no quejas, que estarán dispuestos a sostenernos, pero si hablamos, si no nos quedamos callados anteponiendo la vergüenza, ideas preconcebidas, discordias y demás, cuando en realidad lo que importa también es el restablecimiento integral del que está recostado en el lecho del dolor.

4. Busquen información acerca de la situación por la que la persona que cuidan está atravesando, hay tantas páginas en Internet, serias, que pueden dar una base, orientación, ideas extras para saber actuar de manera oportuna. No necesitas convertirte en médico o enfermera empírica dominando todas las áreas de la salud, solo adquirir conocimientos básicos para saber cómo actuar y que también te hagan comprender mejor la condición para que sea sobrellevada de manera óptima.

CONCLUSIÓN

Si eres paciente sé un ángel, da por lo menos un gracias, colabora con quien está pendiente de ti. Si eres cuidador, sé también un ángel con la comprensión, con la buena vibra, con la verdad y la paz, porque los ángeles combaten, luchan y vencen en medio de los infiernos que a veces la vida presenta.

_{Fuente de la Imagen Pixabay}

Es todo cuanto puedo compartir con ustedes de acuerdo a mi experiencia personal.

Muchas gracias por la oportunidad, por su atención y que tengan un buen día.

Hasta la próxima.