Recuerdo haber visto dietas de lechuga, agua y atún, asumo que son de déficit calórico, ¿Quién en su sano juicio aguanta 1 mes solo comiendo eso?, al mes ya no quieres ver una lata de atún, lo que hace ver claramente que no es una dieta estable en el tiempo.

Ya pisando los 19 años inicie un cambio con un doctor de mi ciudad, el doctor Cuadros si no me equivoco, el era nutriólogo y según había ayudado a muchas mujeres a bajar de peso, fui a su consulta y me colocó unos plomitos en las orejas y me mandó grupos de alimentos para combinar, siendo sincera era una lista muy restrictiva, no podía consumir casi ninguna fruta, quesos, tubérculos, terminé cenando galleta de soda con jamón, con todo mi esfuerzo logré llegar a los 3 meses de dieta y bajé unos cuantos kilos pero apenas dejé de cumplirla a cabalidad todo se fue en rebote... conclusión: No era sostenible en el tiempo.

A medida que pasaban los años y no tenía una alimentación saludable fui subiendo de peso hasta que salí embarazada de mi hija y termine pesando 100 kilos, luego de dar a luz y volver a mi país Venezuela decidí trabajar en un cambio pero uno que yo pudiera manejar, investigué y empecé con lo más sencillo, eliminar y disminuir alimentos ultra procesados, saqué de mi vida los refrescos, panes, dulces y frituras (de vez en cuando me daba un gusto) y con esto logre bajar 17 kilos en 1 año.

Volví a emigrar y adivinen que... subí nuevamente de peso, esta vez a 96 kilos, para ese momento sentí que la historia se repetía una vez mas y que nunca dejaré de sufrir por mi peso, actualmente trabajo en eso, no voy a decir que lucho con eso, no, porque uno debe ser responsable también en como dice las cosas, a la final todo lo que nos sucede sea bueno o malo es porque así lo decidimos.

He entendido que no hay dietas milagrosas, que nada extremo se puede mantener en el tiempo, es mejor crear hábitos alimenticios flexibles, comer comida real, de esa que viene de la tierra sin químicos, disminuir el azúcar, las harinas, beber mucha agua y sobre todo buscar ayuda profesional por que a veces subimos de peso por la mala alimentación o por situaciones internas que desconocemos y que sin duda un medico nos puede ayudar a descifrar y atender.

Yo quisiera una pastilla mágica que me hiciera perder 10 kilos en 1 semana pero vamos a ser realistas, no existe, lo que si existe es la posibilidad de hacer cambios que puedan permanecer y con los que uno se sienta bien, si durante la semana comimos saludable que malo hay en comerse una hamburguesa el sábado? un mal escenario sería comer mal toda la semana y cenar ensalada el sábado.

No caigamos en dietas modas, pastillas mágicas o falsos juguitos mágicos, todo requiere información y guía pero sobre todo hay que discernir en lo que es real y lo que no.

Que tengan un excelente día, recuerda que no importa cuando inicies, lo importante es hacerlo.

Aún me falta mucho para llegar a dónde quiero pero ya inicié y eso sin duda me acerca más a ello 🙂

_{todas las fotos fueron captadas con mi Redmi note 12S}