¡Fui al Médico y no entendí NADA! 🙄 ¿Te ha pasado? | #opinion-original

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Hace como dos años o un poco más, comencé a sentir mucho dolor en mis manos y pies, no podía caminar porque era algo horrible. Se me inflamaban, se enrojece y se colocaban caliente.

Empecé una consulta en un ambulatorio donde el tratamiento prácticamente no me hizo nada y esto me impulsó a buscar un especialista. Me dirigí al seguro que tenemos todos los educadores que es el IPASME para que me atendiera un traumatólogo.

Este me atendió de maravilla, me mandó a hacer mis exámenes, placas y todo y dio con el resultado de la enfermedad. Me informó que tenía artritis y que debería de consultar un reumatólogo que quién trata esta condición.

En mi ciudad no hay muchos reumatólogos, pero sí me recomendaron uno que era muy bueno. El día que salía a consultar al especialista, no estaba segura de la dirección de la clínica, así que pregunté y por confusión me enviaron a la clínica Vargas, que era donde veía uno de los reumatólogos, que al final no era el que me habían recomendado.

Cuando llego y pregunto por el médico, me dicen que no ha llegado, pero me anotaron para que cuando él llegara entrara a la revisión.

El doctor llegó como no lo conocía, pasó desapercibida en lo que me correspondía. Mi turno pasó con mi hija, que me estaba acompañando, y me causó una impresión total la apariencia del médico.

Era un señor aproximadamente de unos 80 y pico de años que andaba un poco enfermo con gripe, cargaba tapabocas y cada vez que hablaba se trancaba para hablar. Era como que tenía una asfixia, producto de la gripe y sus manos temblaban al escribir, por poco me tocó auxiliarlo.

Este me hace mi revisión y me indica el tratamiento, también me dice que debo regresar en 15 días con dos inyectadoras y el tratamiento para colocarlo en la rodilla.

Yo tomé mis récipes y salí de la consulta de lo más normal, pero al subir al carro le comento a mi hija que ni loca vuelvo donde este médico que no me transmitió nada de confianza, además creo que una persona con esta condición no está apta para realizar este tipo de tratamiento o sea inyectar mis rodillas. Salí, fue asustada de ese consultorio y más nunca regresé.

A los días ubiqué la dirección exacta del reumatólogo que me habían recomendado, donde fui atendida por un especialista que, aunque no, explica mucho con detalle los síntomas o consecuencias que trae la enfermedad.

Pero sí me colocó un tratamiento adecuado con el cual me he sentido bastante mejor y todavía continuó como su paciente.

Invito:
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