NAVIDAD "De lo que no se habla"

Este tipo de experiencias familiares me han llevado a manejar mis sentimientos en esta época del año de una manera diferente. Sin necesidad de convertirme en el hombre verde. No ese no, el que se molesta no, el otro, el que supuestamente odia la navidad, he aprendido a ver y apreciar más las cosas sencillas de la vida.

Es quizás por ello que un gesto, un detalle, sea hacia mi o que veo en terceros, me pueden llenar de cierta satisfacción. Entonces mis sentimientos van más por tener una expectativa de tamaño pequeño y simplemente disfrutar los buenos momentos que se den, solo o acompañado.

Por suerte siempre encuentro una manera, una forma, una o más personas que logran llenar ese vacío que en algún momento puedo sentir. Eso sin dejar de lado que disfruto mucho la compañía de la soledad. Así que, en ambos ambientes, trato de ver, vivir y sentir lo mejor.

En la actualidad se habla mucho de la separación de familias gracias a la emigración de muchos venezolanos al exterior. Un tema real y que no está lejos de un pensamiento que me invade y que busca empáticamente entender las sensaciones que experimentan muchos estando lejos de sus seres queridos.

Mi experiencia no me deja ir mas allá. Extraño a muchos amigos, amigas, amistades que en años anteriores compartíamos mucho en esta época y están fuera del país. sin embargo, aunque pueda entristecer, hay que asumir que las cosas pasan por algo y que, aunque muchas veces no lo entendamos, la teoría dice que se hace lo que se hace en pro de conseguir algo mejor. Allí los sacrificios.

Dentro de esa idea del sacrifico entra la parte material. Es cierto que sería muy agradable cumplir con las tradiciones como lo hacíamos en años anteriores. Pero simplemente hay que asumir la realidad y adaptarse a lo que estamos viviendo.

Esto no quiere decir que nos estamos convirtiendo en seres conformistas. Creo que hacer esa adaptación va más por no quebrarnos la cabeza contra la pared por conseguir y vivir cosas que no son muy factibles.

No es nada normal quedarse viviendo en los recuerdos de lo que era olivando el momento que atravesamos. Hace quince años mi situación era otras y aunque los recuerdos son agradables no dejo que los mismo dicten mis sensaciones actuales. No sé si me doy a entender.

Claro que me hubiese gustado poder disfrutar de un plato navideño con pernil, hallacas, pan de jamón, ensalada de gallina con un buen refresco cola negra bien frio y de postre un quesillo con torta negra para luego compartir con amigos y seres queridos unos cantos tragos mientras pico unas lonjas de jamón planchado.

Pero no se dio y ya. No pienso darle justo al espíritu de la navidad pasada recordandome algo que no podre lograr y que bajara el nivel de alegría de la actualidad.

Para cerrar. Creo que dentro de todo existen situaciones que son mucho peores de las que vivimos en la actualidad. No solo en las personas que no puedan darles una hallaca o un regalo a sus hijos o que simplemente no pueden compartir con un ser querido que dejo este plano terrenal.

En realidad, lo que me impulso a crear esta publicación fue un meme *(aunque en teoría los memes son cosas graciosas) que vi en una red social y que me llevo a pensar profundamente sobre si en realidad mi situación es tan mala y tengo derecho a quejarme.

Fuente

Sé que quizás este infringiendo la regla sobre el derecho de autor con esta imagen, sobre todo si tomamos en cuenta que fue publicada en Facebook, pero es que el mensaje de la misma me movió profundamente los sentimientos dándome un baño de realidad. Si debo cambiar la imagen, por favor háganmelo saber.

Puedo entender, y créanme que soy sincero al escribir esto, la molestia, frustración, indignación, entre otras cosas, que pasamos muchos venezolanos en la actualidad (no es que en otros países las cosas no sean parecidas pero mi experiencia real no traspasa fronteras) pero al hacer comparaciones, quizás debamos ser agradecidos por lo que tenemos.

Quizás sea poco, quizás antes era mejor, pero la realidad es que siendo poco todavía podemos disfrutarlo. Solo piensen en el sufrimiento de aquellos que en estos momentos son víctimas de un genocidio, de una eliminación sistemática impulsa por interés económicos abanderados por una religión.

Espero que sus pensamientos o respuesta a esta realidad no tenga como premisa frases como ”no es asunto mio”, ”Ellos se lo buscaron”, ”Se lo merecen” o ”Eso sucede lejos de aquí”, entre muchas otras.

Si es así, simplemente mi publicación carece de sentido total para quienes prefieren hacerse la vista gorda a una realidad cruda y existente. Así que, de antemano, les pido disculpa por hacerles perder el tiempo al leer esto.

Nos han hecho pensar que no podemos o tenemos el poder para lograr parar esta situación. Pero lo cierto es que si lo tenemos. La pregunta es… ¿Queremos?

Hasta aquí esta publicación. Me gustaría extender una invitación a @emy.pets05, @blessedlife, @fjjrg, @cruzamilcar63, @marvinvelasquez, @vasc0, @solperez, @genomil y a @napito para que se unan a esta dinámica.

Emoji creado en Bitmoji. Diagramación de mi autoría

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