Una extraordinaria invitación del equipo RECREATIVE STEEM. Ustedes son muy creativos y lo agradecemos; ya que textos como el Principito, son clásicos de la literatura universal, que nos hace ser más sensible y perspicaces. Amo esta obra de Antoine de Saint-Exupéry.

MIS TRES PERSONAJES

Un cordero u oveja:

Cuanto no quisiéramos tener algún tipo de animalito que se coma los problemas normales de la vida. Así como el principito quería una oveja para que acabara con los baobabs, conocido también, como los gigantes africanos, así nosotros necesitaríamos un rebaño entero que extermine todo árbol peligroso en nuestra vida. Pero, así no funciona, los problemas seguirán retoñando, el tema es no dejarlos crecer.

Un rey:

El principito se encontró con un rey que parecía justo. Para mí no era justicia, era conveniencia, jajaja. Él no quería ver vulnerada su autoridad, de modo que ponía todo muy convenientemente, como para no ser desobedecido. A veces, siento que actuamos como ese rey, acomodando todo muy a nuestra conveniencia, intentando que el río siga un rumbo que le hemos trazado con piedras. Lo que ignoramos es que las aguas tarde o temprano tomarán su propio y natural cauce, y todo el esfuerzo será en vano.

Un farolero:

Como al principito, a mí, lo tantos faroleros de la vida me conmueven mucho. Siento que mantienen la máquina de la vida girando a tono, y aunque no se esfuerzan por hacer grandes diferencias, logran de la responsabilidad bien ejercida el valor más importante de sus vidas. Quizá no tengamos el trabajo más importante, sin embargo, es loable cumplir con los deberes para que todo siga avanzando como ese planeta pequeñito del farolero de la historia.

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MI REFLEXIÓN PARA ESTOS DÍAS DE PANDEMIA

Una pandemia, una nueva normalidad, tiempos inéditos; todo tiene en común un verbo que se me viene recurrentemente a la cabeza: REINVENTARSE. Es, para mí, una capacidad propia de la vida humana, hacer que todo vuelva a valer la pena, sin importar el dolor que la transición hace que pasemos.

Como el querido niño rubio, yo pienso que hasta lo hermoso puede llegar a cansarnos y sernos contraproducente. Por ejemplo, extraigo (textual) del libro:

—¡Un día vi ponerse el sol cuarenta y tres veces! Y un poco más tarde añadiste: —¿Sabes? Cuando uno está verdaderamente triste le gusta ver las puestas de sol. —El día que la viste cuarenta y tres veces estabas muy triste ¿verdad? Pero el principito no respondió.

Amaba realmente ver las puestas de sol, lo que no esperaba es que esto ya no llegara a conmoverlo cuando se volvía una terrible rutina. Hasta lo hermoso cansa, así es, querámoslo o no. Por lo cual, concluyo, que debemos superar el hecho de que lo lindo no pasa todos los días. Que lo más normal de la vida es pasar por pruebas y adversidades, que nos fortalecen y hacen crecer el alma si las logramos vencer.

Soy Blanca,
y me despido agradeciéndoles su tiempo para leer y responder.
@blancap60

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Invito a mis amig@s @ibe2021 @lita2021 y @oacevedo a unirse a este reto literario.

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Abrazos para todos y todas.

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Gracias por el apoyo