El viernes resultó ser uno de esos días en que la naturaleza nos demuestra que absolutamente nada está dentro de nuestro control, salvo nuestras reacciones a los eventos que el azar nos pone en la puerta. Ya les cuento a que me estoy refiriendo.
Hoy amaneció lloviendo, aunque no era una tempestad, era suficiente para que mis planes de ir a hacer mis compras el dia de hoy se vinieran abajo. Pensé entonces en hacerlas mas tarde, aquí mismo en la zona, si no comprar todo lo que tenía planeado, al menos lo más necesario para tener que almorzar hoy y la próxima semana.
Luego de realizar mi aseo personal y desayunar ligero, encendi la PC para revisar mis notificaciones en Stemit. No tenia muchas, mas que todo respuestas a las verificaciones que he hecho en el challenge de la comunidad esta semana. Es grato ver como hay esa retroalimentación entre nosotros y los participantes y como reciben de buena manera los consejos que les puedas dar para que mejoren sus publicaciones y manejen adecuadamente su poder de voto.
Sin embargo, lo que parecía iba a ser una mañana tranquila, se convirtió en un obstáculo de esos que te pone la vida, pues a consecuencia de las lluvias, la electricidad comenzó a fallar hasta que culminó con un corte de electricidad a eso de las 11.
Pensé entonces en adelantar las compras en los comercios del sector, mientras restablecian el servicio, pero el corte de energía fue muy extenso, desde las tres comunidades ubicadas en el kilómetro 11 de la vía, hasta la entrada del cementerio en el kilómetro 12. Todos los comercios cerraron sus puertas y solo atendían clientes con efectivo, pues no tenían forma de procesar pagos electrónicos.
Regrese a casa un poco frustrado por no haber podido hacer nada de lo que me había planteado hoy. La lluvia comenzó a hacerse un poco más fuerte, cosa que iba a complicar más el restablecimiento del servicio, pues no es nada seguro trabajar electricidad bajo la lluvia.
Las horas fueron pasando y la lluvia no paraba, el corte de energía era tan extenso que presumi que también había afectado las torres celulares cercanas, pues apenas tenía un par de barras en le indicador de cobertura de mi telefono, solo podía enviar y recibir mensajes por SMS y aplicaciones, pero la cobertura era tan débil que una cosa tan simple como abrir el el navegador era imposible.
Empecé a releer un libro de mi biblioteca para pasar el tiempo, sin embargo luego de un rato el hambre comenzó a desviar mi atención de la lectura. Que podía comer si no podía cocinar? Mi cocina es eléctrica y ninguno de los vecinos podía hacerme el favor, pues la mayoría estaban esperando el llenado de las bombonas de gas que ya tenia 15 dias de retraso.
Así que muy a mi pesar, tuve que recurrir a mi mentalidad de superviviente. El superviviente analiza todo desde la perspectiva del ahora, asi que recorde que habia quedado un pedazo de pan del desayuno y en el congelador de la nevera reposaba medio envase de helado de chocolate, que lo uso para controlar la ansiedad. Ese fue mi almuerzo y con hambre me supo excelente la combinacion.
La lluvia se había atenuado un poco, era un poco más de las cinco de la tarde. Ya con la conformidad de que este problema no se iba a solucionar temprano, continue releyendo algunos capítulos importantes del libro y luego intente dormir un poco. La mezcla del helado y el pan me dio sueño.
Dormi varios minutos, casi una hora. Lo cierto es que al despertar había oscurecido bastante, por lo que busque unas velas que había comprado unos días antes. Estoy pensando en hacer el gasto de comprar una lampara de energia solar, pues estos asuntos se están volviendo muy frecuentes.
Lo cierto es que luego de encender y posicionar estratégicamente tres velas, restablecieron el servicio, con algunos tropiezos que fueron corregidos unos minutos después. Después de estar seguro de que no habría más fallas, procedí a conectar todos los dispositivos, pues los había desconectado temprano al ver tantas fallas juntas antes de que el servicio fuera interrumpido. Eran las 7:30 de la noche.
Lo primero que hice mientras la PC realizaba el encendido de fábrica, fue ponerme a preparar comida, quería comer algo caliente. La PC enciende perfecto, estaba preocupado porque luego de una falla eléctrica que hubo el fin de semana anterior, no me quiso encender el lunes, afortunadamente luego de desarmar, hacerle mantenimiento y rearmarla encendió como si nada.
Me prepare una arepa con queso y una buena taza de café para la cena, bien calientes y me la comí con un gran gusto, pues luego de almorzar helado aunque sea de chocolate, comprendes el valor de un plato de comida caliente. Luego pude culminar con las actividades que tenía pendientes en la PC.
Así amigos, termino mi dia. Espero que se hayan entretenido con mi odisea de un dia sin electricidad.
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