La mentira en los niños... Cómo evitar este mal hábito.

Al igual que los adultos, los niños también mienten, sin embargo, es una situación muy engorrosa y desagradable en la que a menudo no sabemos cómo actuar.

Los estudios científicos han demostrado que la aparición de mentiras en los niños generalmente ocurre a la edad de cinco años. En ese momento, los padres descubren que sus hijos pueden mentir y comienzan a darse cuenta de que ya no tienen control sobre una parte de sus vidas.

Las mentiras a menudo tienden a estar más relacionadas con la fantasía y la imaginación, sin embargo, es muy importante saber cómo distinguir entre realidad y ficción, entre comportamientos dañinos y posibles errores para evitar convertirse en una herramienta que usan con frecuencia.

Lo primero que debemos saber es que los niños mienten por diferentes razones, como: evitar el castigo, la frustración, el miedo, atraer la atención, el placer de poner a otros niños en problemas, por imitación, protegiendo a alguien, etc.

Hay 3 expresiones que ayudan a revelar si el niño está mintiendo o no. Estos son:

1. Expresión facial: cuando dice la verdad, el niño está muy tranquilo, relajado y seguro de lo que dice, pero cuando miente, su comportamiento es muy extraño, no lo miran a los ojos ni les resulta difícil sostener la mirada. , él actúa con ansiedad y su expresión es más tensa.

2. Falta de espontaneidad: si en el momento en que el niño explica, se da cuenta de que todo lo que dijo parece ensayado o preparado, y si hace preguntas, no responde de forma natural, lo hace de manera forzada o intenta cambiar el tema, Es otra indicación de que el niño miente.

3. Cómo se expresa: si aparecen inconsistencias o falta de significado en sus explicaciones, se ríen o se enojan mucho si no se les cree, es una indicación de que el niño no está diciendo la verdad.

Teniendo en cuenta lo anterior, como padres debemos tener en cuenta lo siguiente:

• Sé un ejemplo para ellos.

• Confía en ellos.

• No recurras a las "mentiras piadosas".

• Hágales saber a sus hijos que, a pesar de sus errores y travesuras, son valorados y amados en todo momento.

• Deje que el niño vea los efectos negativos de las mentiras y cómo pueden tener consecuencias devastadoras.

• Enséñeles a tener amor propio, para que no tengan que mentir para complacer a los demás.

• No exija más de lo que el niño puede darle.

• Haz que aprendan a tomar decisiones conscientes y a sentirse seguros con ellos.

Mentir es una capacidad que se aprende en la infancia, especialmente si no hay una orientación adecuada de los padres. Pero aunque es un poco difícil, hay muchas maneras de evitar que nuestros hijos mientan sin causar daño físico o dañar la relación.

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