Hablemos de los animales.

Anécdotas varías, es contaré un par.

Cerca de casa pasaba un señor con sus chivos no eran muchos, y siempre nos acercábamos a verlos y quizás acariciaros un poco si se dejaban. Un día uno de los chivo al verme cerca de el se coloco en posición y comenzó a correr hacía mi, me di la vuelta y traté de huir, pero fue inútil, me alcanzó y me cachó, al piso fui a dar.

Estando embarazada de Luz tenía un par de periquitos La fufurufa y el fufurufo. El fufurufo era más cariñoso y muy pero muy pegado a mi mamá. Ellos estaban sueltos en la casa, especialmente en mi habitación. Esa mañana salimos y el fufu decidió salir por la ventana siendo alcanzado por Thunder un perro que había en casa (mío también), él no le hirió, pero el susto fue tanto que infartó. Mis hermanos me llaman y me regreso y me quedé en casa llorando mi perico.

Lloré toda la tarde, mi vecina se entra de lo sucedido y casualmente llega un perico a su casa, pero de los australianos, y me dice mira toma este periquito, y abre sus manos y este escapa, siendo atrapado por benito, otro perro, pero de mi papá, este se lo comió, por lo que terminé llorando aún más.