¿Alguna vez te has preguntado, que se sentirá ser un diente de león siendo llevado por el viento? Alejarte de tu inicio y visitar lugares que nunca imaginaste, conocer cosas nuevas, cosas que no tenías cuando eras un diente de león atado al suelo. Ha de ser una experiencia única e inimaginable, la mejor manera de disfrutar tu vida y de hecho puede ser el verdadero sentido de la vida...
Yo sí me lo pregunto algunas veces y me llena la nostalgia de algo que no he vivido pero pienso que sí, tal vez en mi vida pasada fui un diente de león, tal vez fui un ave o tal vez solo me hubiese gustado tanto eso que quiero pensar que alguna vez lo viví.
Si comenzara a hablar de mis anhelos no terminaría hoy, porque a pesar de ser un simple ser humano con una vida bastante simple, yo tengo anhelos; anhelos tan simples que cualquiera podría complacer pero yo siendo un humano básico no puedo complacer mis anhelos, sin embargo, ser alguien simple no me quita las ganas de soñar con cosas que cualquier persona vería como sencillas pero o creo que esas cosas serían las que llenarían mi vida.
Las personas solo dicen: "pero hazlo, no es difícil", "que tonto, hasta yo puedo". Pero tristemente yo no puedo, tengo que atarme a mis necesidades carnales básicas para poder sobrevivir; vivir como una pequeña hoja que se encuentra en la copa del árbol, esperando que una brisa fuerte se la lleve a viajar o esperar a sólo envejecer y caer del árbol para terminar cerca de sus raíces viendo más de lo mismo.
Anhelo ser un diente de león que se lo lleva el viento apartándolo de su tristeza y soledad, que es arrancado de su agujero y llevado a pasear, quiero volar y sentir la vida en mi cara, quiero morir siendo parte del viento que nunca se acaba.
