Acostado sobre su espalda con sus cuatro patas al aire se encontraba la mascota de la familia. Su cabeza reposaba sobre la tela donde normalmente dormía. Su hocico abierto y su legua afuera choreando algo de baba.

Estaba confinado en su zona perruna ya que en la época de navidad él era el destre ambulante. No lo dejaban entrar mucho a la casa ya que los que para la familia era adornos de la época, para el eran juguetes que por lo general terminaban rotos o deformes.

La familia disfrutaba de la nieve que había caído la noche anterior en el jardín frontal de la casa y ese era el motivo principal del confinamiento del canino. Si presencia en aquel disfrute familiar significaba estar dispuesto a sufrir las travesuras destructivas del can.

Un clip fuerte saco del mundo de Morfeo a la mascota. Al abrir sus ojos pudieron apreciar que la luz artificial comenzaba a sustituir la luz natural. Abandono la postura con la que dormía y se posó sobre sus cuatro patas.

Todavía soñoliento, abrió a todo su expender su hocico para bostezas. Luego quito la pereza de su cuerpo estirando su cuerpo hacia atrás soportando con sus pátases traseras y después a la inversa.

Ya con la aptitud estable, vio que la puerta de lo que es su zona perruna, estaba entre abierta. Agudizo la mira y lentamente se fue acercando a la misma. Estaba el solo frente al límite de su confinamiento.

Nadie veía, nadie lo vigilaba, estaba a punto de volver hacia su libertad. Empujo con su hocico la puerta y esta se abrió lentamente. Al ver el camino despejado, salió a toda velocidad hacia su libertad.

El impulso que llevaba era tal que produciría envidia a aquellos que practican la velocidad en el deporte. Recorrió en pocos momentos el patio del lado derecho de la casa dirigiéndose al frente de la misma.

Llego a la esquina de la misma y cruzo sin importarle que o quienes estuviesen en aquel lugar. En su rostro llevaba la expresión de alegría que siente aquellos que logra a tener la oportunidad de volver a hacer lo que quieran.

Ya en el jardín frontal de la casa una figura lo sorprendió. Intento detenerse, pero la nieve se lo impidió. Se deslizo por la misma mientras intentaba detenerse haciendo marcha atrás con sus patas.

Al detenerse quedo estático sentado sobre sus patas traseras. frente a él, distanciado por algunos metros, se encontraba aquel ser blanco de forma redonda y con sobrero de copa negra, ojos negros y nariz color naranja.

Sus orejas se dedicaron a tratar de escuchar algún sonido que le diera pistas sobre quien era aquel ser. Su sentido olfativo buscaba algún olor que le diera pista mientras sus ojos observaban a medida que su cabeza se inclinaba a un costado.

Escucho risas contenidas y esto lo hizo exasperarse. De manera repentina se apoyó en sus cuatro patas y comenzó a gruñirle a aquel intruso con gran intensidad. Sus muestras de agresividad no hacían mella en aquel ser blanco.

Al ver resto, sus gruñidos se trasformaron en fuertes ladridos. A medida que los ladridos eran más fuertes podía escuchar el incremento de las risas. Siguió emitiendo los sonidos de alerta por un buen rato.

De repente ceso de hacerlo. Vio que sus quejas no había efecto en aquel ser. Aquel intruso solo seguía parado estático frente a él mirándolo fijamente con sus redondo ojos negros.

El can quedo inmóvil. Analizaba cual será la mejor estrategia para enfrentar a su oponente. Veía fijamente. De vez en cuando su cabeza se inclinaba hacia un lado. Luego hacia el movimiento a la inversa sin dejar de ver al intruso.

La picardía se dibujó en su cara e inmediatamente después agacho su cuerpo al ras del piso y comenzó a moverse en dirección del hombre blanco de sobrero de copa.

Con el mismo sigilo de un soldado recorriendo el campo de batalla enemigo, se acercó a aquel ser. A medida que recortaba la distancia podría ver que, a pesar de sentirse observado por aquellos redondos ojos negros, el intruso no se movía.

Se acercó tanto que su nariz logro tocar aquel cuerpo frio. La impresión lo fizo retroceder con gran velocidad. Se detuvo a escasos metros del aquel ser frio. Giro hacia él y vio que no había hecho ningún movimiento.

Lo inerte del intruso hizo cambiar la percepción de la mascota. Definitivamente aquel intruso no era un enemigo. De serlo, lo hubiese atacado. ¿Pero por qué no se mueve?

Fuente

Tenía que comprobar su nueva teoría. Camino unos pasos hacia el costado. Tomo una rama con su boca y de manera juguetona se acero al ser de sombrero de copa negro.

Con pequeños saltos, se mostraba juguetón mientras se acerca al inerte ser. Veía que sus gestos alegres no causaban efecto en el intruso y lo incremento mas para lograr un efecto positivo.

Rodeaba a aquel ser mostrado su manera juguetona, alegre, de paz, pero nada. Aquel ser seguía sin hacer ningún tipo de movimiento o de gesto. Simplemente permanecía allí parado, como si no le importara la existencia de aquel ser de cuatro patas.

Los movientes físicos del can comenzaron a pasar factura y poco a poco fueron disminuyendo hasta quedar parado allí con la rama a medio sostener en su hocico. Frustrado dejo caer la misma al suelo y se acercó algo desconcertado al ser de sombrero de copa.

A pesar de lo inerte de aquel ser, podría escuchar las risas contenidas. No lo entendía. Se mostraba agresivo y no veía reacción, se mostraba alegre y el efecto era el mismo.

Sintió cierta molestia por ello y se acercó al hombre frio con gesto de desdén, golpeo el cuerpo de este con su hocico. Esto hizo que un poco de nieve que había en la nariz naranja del hombre de sombrero de copa cayera en la cabeza de la mascota.

Al sentir el golpe producido por la nieve en su cabeza, el miedo domino al can y luego de emitir un gran quejido de por la sorpresa salió en carrera para alejarse del intruso. A los pocos metros se detuvo y comenzó a ladrarle.

Al pasar esto, simultáneamente las risas incrementaron su volumen. Desde la ventana de la casa, para, mama y la pequeña niña se reían de la actuación de la mascota de la familia.

Lo que era algo difícil de entender para el can, era movimientos graciosos para la familia. Al final la inocencia del perro dominaba la situación.

Todos reían al ver como el perro ladraba. Al cabo de un corto tiempo, comenzó a bajar la intensidad de las carcajadas. Ya casi extinta esta expresión alegría. La niña abrazo a su madre y con voz alegre le pregunto:

– ¿Mama? –

– ¿Dime mi amor? –

– Ese Floppy está loco, ¿Verdad? –

F I N

¡Saludos!... Un cordial saludos a todos los miembros de la comunidad #Writing&Reviews y al resto de la gran familia #Steemit.

Acá mi participación en el concurso EUFORIA POR LAS HISTORIAS, en su tercera edición y que es organizado por @vivigibelis en esta comunidad.

Las mascotas son una alegría para quienes la posean y que sepan cómo tratarlas. Ellas nunca dejaran de sernos fiel, a pesar de que existan personas que no las traten de la manera adecuada.

Antes de despedirme quisiera invitar a @franyeligonzalez, @aplausos, @nahela y a @soywilfredg para que participen en esta iniciativa.

Emoji creado en Bitmoji. Diagramación de mi autoría

Si quieres conocerme un poco más visita mi publicación de presentación en Steem atreves de este enlace

No supe como delegar a la comunidad. Para la próxima