Un gran saludo a todos mi amigos Chef, los tenía un poco abandonados pero, estoy nuevamente de vueltas y muy contenta de compartir con ustedes mis delicias de comida del día 17-01-2025.

Bastante agradecida con mi Dios, por haber tenido los alimentos en mi mesa, de esa forma me pude mantener con energía y pude realizar todas las actividades del día. Lo mejor de todo llegó el agua por tubería que alegría, lo malo es que me tocó hacer oficios jejejejeje…. Siendo las 6:00 de la mañana comenzó a salir el aire por las tuberías, es señal que ya comenzaron a bombear el agua y pronto podremos disfrutar del vital líquido.

Después de despertarme di gracias a Dios por un nuevo día de vida, me levanté, realicé mi aseo personal y me dispuse hacer el desayuno. Siempre que preparo algún jugo que contenga remolacha o zanahoria, después de colar guardo el bagazo, el cual es muy bueno para el estreñimiento. Aproveché me quedaba algo en la nevera, lo amasé con un poquito de harina pan, al estar lista mi arepa la rellené con queso blanco rallado y la acompañé con mi taza de café.

Después de ordenar la cocina, ya el agua por la tubería comenzó a salir con fuerza, busqué toda la ropa sucia de la semana, la clasifique por colores y la primera lavadora fue la ropa blanca, mientras la lavadora terminaba su ciclo de lavado, para el almuerzo monte a cocinar unas caraotas negras.

Siendo las 12:00 del mediodía ya había terminado de lavar toda la ropa, las caraotas negras ya estaban blandas y aproveché para aliñarlas, cociné pasta larga me freí un huevo, unos plátanos y le agregué queso blanco rallado.

Dicen que después de comer no se puede dormir porque nos crece más los rollos de la panza, pero como estaba cansada y me quedaba muchos oficios por hacer, me acosté un ratito para renovar las energías. Lo cierto me quedé dormida por dos horas y me levanté como nueva.

Al terminar de lavar los baños y limpiar el piso, ya había terminado con la mayor parte de la limpieza, me provocó preparar algo suave para la cena. En la nevera me quedaba unas zanahorias, calabacín y un pedacito de pollo, lo metí todo en una olla y los cociné sancochados, le agregué unas ramas de cilantro y sal al gusto.

Llegó la hora de relax, "No hay fórmulas para el amor" me encanta ver las películas románticas alemanas porque en las escenas se observan hermosos paisajes, la vestimenta de las artistas son coloridos suaves y hermosos, las escenas son suaves con vocabulario respetuoso. Mientras disfrutaba de mi película, de merienda me tomé una sabrosa taza de chocolate y después me tomé otra porque estaba de lo más deliciosa.