Desde pequeña tengo afición por los programas forenses. Desde la trilogía, de CSI de Jerry Bruckheimer hasta MayDay Catástrofes aéreas. La sola idea de recoger lo que quedó y recomponerlo, generar una línea de tiempo para saber de forma casi detallada, qué fue lo que ocurrió, cómo ocurrió y por qué ocurrió.

En los casos criminales, la moral y la justicia están ausentes. Sólo son conceptos que se pueden pervertir con mucha facilidad. La gente puede morir de forma premeditada, de forma accidental, por negligencia y por muchas otras causas.

El ajedrez retrospectivo y los libros que recopilan jugadas de grandes maestros nos ayudan a entender porqué él o ella hizo ciertos movimientos.

A la hora de participar en un juego y enfrentarme al retador de turno no soy capaz de ganar. Soy capaz de congelar la jugada, es decir, hacer una buena defensa y hacer que la sesión dure bastante tiempo. Cuando el/la contrincante consigue deshacer mi resistencia, procede a derrotarme.

A pesar de todo lo que tengo memorizado y de las posibles respuestas que podría dar, no consigo ganar sesiones de gran importancia. Creo que cuando mentalizo que una que otra sesión tiene cierta importancia me bloqueo y no puedo comportarme a la altura.