Esta vez traigo mi participación para este concurso y como siempre lo digo: 🤭 me encanta este tipo de actividades y sobre todo cuando es de esta manera, poner a prueba la creatividad.
—¿Dónde está mamá?—Dijo Elana desconcertada, despertando de su estado de inconsciencia que le había producido al golpear su cabeza bruscamente sobre la arena, siendo arrastrada por el mar hasta la orilla.
—¡Papa despertó!— Miguel había pasado 23 largos minutos a su lado esperando que su hermana diera alguna señal de vida.
El padre de ambos corrió desesperado a su encuentro, tenía largo rato buscando en la orilla de aquella playa a la que habían sido arrastrados por las fuertes olas después de que su barco se perdiera entre las grandes olas hasta ser devorado por el mar, llevando a sus tripulantes a quedar dispersos por las orillas de una playa desierta.
Era una hermosa mañana de octubre, la familia tenía 3 meses planificando una fiesta sorpresa para la madre de la familia conformada por el padre y sus dos hijos, Elena y Miguel. Habían planeado ir en el pequeño pero hermoso bote del abuelo a pasar un día en el que había planificado todo tipo de actividades juntos, solo estaban invitadas 2 amigas íntimas de la madre así que la iban a pasar muy bien.
Todo había salido como lo habían pensado, excepto porque una de las amigas de Marta canceló la reunión, tenía otros asuntos urgentes a los que atender así que le tocó con mucha pena cancelar a la invitación, por lo tanto, se fueron toda la familia y Karen una de las amigas de Marta que había sido invitada a la celebración.
Karen era una mujer hermosa y carismática, había visto crecer a los hijos de Marta y siempre estaba presente en los asuntos familiares, la trataban como a otro miembro de la familia, y siempre había visto de cerca como era el matrimonio de Marta. Carlos era un hombre atento con su esposa, detallista y siempre hacia lo posible por agradar a Marta su esposa y aparte de todo era el mejor padre del mundo para sus hijos Elena y Miguel.
Lo que nadie sabía, era que entre Karen y Carlos había un romance, mucho antes de que él se casara con Marta, siempre lo había mantenido oculto de su esposa pero no porque le estaba mintiendo sino porque para él era algo del pasado y nada más. No pensaba Karen lo mismo, ella llevaba muchos años de su vida en el sigilo buscando de alguna manera recuperar el amor de Carlos o tener con el lo que él había construido con Marta. Nunca había tenido la oportunidad pero hoy era el día, nadie lo sabría, sería un pequeño accidente que le daría la oportunidad de poder tener lo que tanto había deseado.
— Acompáñame quiero enseñarte algo.— Dijo Karen a Marta mientras los demás preparaban algo para comer.
Mientras que caminaban hasta el extremo del bote, Karen se abalanzó sobre Marta y la empujó por la por la borda hasta que esta calló al mar. Nadie notó nada ya que todos estaban ocupados así que Karen volvió como si nada e hizo parecer que venía de un pequeño dormitorio que tenía el bote.
—¡Que rica se ve esa comida!— Exclamó Karen al ver lo que estaban preparando.
Todos estaban cada uno haciendo algo para Marta incluida Karen que se había avocado para ayudar así que después de un rato de preparar todo, salieron a buscar a la cumpleañera sin encontrarla por ningún lado.
Desesperados todos, pues ya llevaban mucho tiempo navegando así que estaban lejos de cualquier costa. Los niños comenzaron a gritar y dar voces a ver si su madre respondía pero no la encontraban. Miguel tomó el timón y encendido el bote navegó sin rumbo y con desesperación hasta que sin darse cuenta calló la noche sobre ellos.
—No está en ningún lado.— Afirmó Miguel con un aire de desconsuelo y desesperación.
Karen parecía estar ayudando a buscar y dispuesta a dar ánimo a los niños. De repente las olas comenzaron a ser cada vez más grandes hasta que llegaban a cubrir el bote y terminaron naufragando me medio de la noche y lo último que supieron es que las olas los arrastraron hasta la orilla de algo que parecía ser una isla desierta.
—Gracias a Dios estas bien!— Dijo Miguel entre llantos y feliz al mismo tiempo de que su hija estuviera con vida.
No importó el dolor anterior, no había lugar para detenerse a pensar que en lo que había pasado, solo sabía que estaba agradecido por la vida de su hija y que también su hijo estaba vivo. Su esposa no apareció hasta hoy y Karen fue encontrada días después, su cuerpo flotando en las aguas del mar.
Ellos nunca sabrán lo que pasó, siempre lamentarán aquel accidente de ese terrible día de octubre donde no solo perdieron a su madre, si no también a aquella amiga tan especial para ellos.
Y así concluye mi relato, 😁 me encantaría invitar a mis amigas @erikamr y @kete.alex a participar.