Mi día comenzó a unos minutos para sonar la alarma a las 6:00 am, me levante rápidamente y es que la noche anterior había deseado que amaneciera rápido ya verán porque, Ore a Dios para agradecer y pedir que todo saliera bien, luego realice mi aseo personal lavando mi cara y mis dientes como de costumbre y prepare un par de arepas que nos tendríamos que llevar para comer hoy fuera de casa ¡pero no salimos sin tomarnos una deliciosa taza de café! (foto de portada)

Íbamos camino al Hospital Dr. José Rangel de Villa de Cura pero en vista del que el Dr. que atendería a mi esposo no había llegado buscamos un lugar donde desayunar, lavándonos las manos antes (pues llevaba agua y jabón)

Cuando toco el turno de ser atendidos nos pidieron algunos insumos que se utilizarían para drenar el absceso tuve que salir a comprar lo que faltaba ya que yo llevaba algunas cosas. Es bien sabido que en Venezuela para ser atendidos en los Hospitales públicos hay que comprar todo lo que se necesite para atender al paciente, desde lo mas mínimo como inyectadora, guantes, gaza, hasta lo mas complejo, bisturí (fueron las cosas que nos pidieron a nosotros)

Fui relativamente rápido, al traer las cosas de nuevo tuvimos que seguir esperando. A eso de las 10:30 apareció el Cirujano que no sabíamos donde andaba (risas) y paso a mi esposo para atenderlo. Pidiéndole que se acostara lo anestesió hizo una incisión , le dreno, aplicando yodo le taparon con gaza dándole las recomendaciones a seguir. ¡Y listo! Gracias a Jehová Dios todo salió bien.

Unos amigos amablemente nos fueron a buscar para traernos a casa fue un gran alivio no tener que venirnos en transporte publico que siempre anda abarrotado de personas. Por lo de la pandemia y viniendo del hospital nos quitamos todo, hasta la gaza que le habían puesto en el ojo, nos bañamos, le hice de nuevo la cura, nos comimos un pan y de lo cansado que nos sentíamos por no descansar bien la noche anterior nos fuimos a dormir el resto de la tarde.

A eso de las 5:00pm ,nos levantamos y a esa hora fue que almorzamos. Es una bendición la ayuda de mi hijo @jasa107 y que le guste la cocina. Nos guardo unos ricos frijoles chinos con arroz.

Después fui a casa de mi mama a contarle los pormenores del día de hoy. Ya regrese a eso de las 8 prepare una rica avena espesa como nos gusta nos la tomamos en nuestras tazas preferidas y regalo de aniversario de año pasado.

Mas tarde me dedique a revisar mis notificaciones de @steemit a leer los mas de 600 mensajes del Telegram de Cotina para ponerme a día con las novedades del día, hasta que me venció el sueño y me fui a dormir.