Calcetines Disparejos

Para conmemorar el Día Mundial del Síndrome de Down, se nos invita a través de este concurso a colocarnos calcetines disparejos... una hermosa iniciativa para tener presente en estos espacios esa significativa fecha.

_{Portada diseñada en PowerPoint/ Imagen propia/ F}

---

¿Te sentiste extraño? ¿O sentiste que alguien te miraba raro al tener calcetines disparejos?

En realidad, no me sentí raro ni incómodo. Recordé que, hasta los 25 años aproximadamente, solía usar calcetines de diferentes colores. No reparaba si estaba completo el par o no, lo importante para mí era que los pies estuviesen cubiertos. Ahora que los volví a usar, el único que me miró extrañado fue mi cuñado, pero como ya sabe que cuando estoy fotografiando animales, plantas, calles, cualquier cosa que me parezca interesante, o enfrascado en actividades que resulten inusuales, es con el propósito de participar en algún reto de Steemit, solo sonrió y me dijo que iba a parar en loco.

---

¿Cuáles son tus colores favoritos para los calcetines?

Antes solo me gustaban los calcetines blancos, pero como estos tienden a ensuciarse demasiado, entonces cambié y ahora tiendo todo el tiempo a comprar los de tonalidades oscuras. Siempre pensando en el lado práctico, por otra parte, un buen día decidí que todos serían del mismo color: negros, ya que así, cuando se perdiera alguno, no iba a tener problemas. Sin embargo, mi esposa que no está de acuerdo con esa uniformidad, cada vez que puede me regala de otros colores para que combinen con la ropa que utilizo.

---

¿Usas calcetines impares o rotos frecuentemente?

Como ya señalé, no me molesta para nada usar calcetines impares. No acostumbro a hacerlo en la actualidad, pero en ciertas oportunidades, sobre todo cuando se pasan los días y no da tiempo de lavarlos, los utilizo tranquilamente; es más, eso no representa ninguna contrariedad porque los pantalones casi nunca dejan que los calcetines queden a la vista. Poquísimas veces me pongo unos que se encuentren rotos, ya que me molestan. Mis dedos como que buscaran los huecos para salirse por allí y chocar con la superficie del zapato, lo cual me resulta sumamente incómodo.

---

¿Crees que la lavadora se traga los calcetines?

Es una de las posibles explicaciones que he contemplado ante la inevitable pérdida de esas prendas de vestir. Es inexplicable, cuando vivía en el pueblo en una casa inmensa, llena de hermanos y visitada por un montón de gente, pensaba que los calcetines se quedaban extraviados en cualquier recoveco de los tantos que existían entre el enorme patio y el amplio interior. Sin embargo, ahora que resido en un apartamento y apenas somos cuatro personas, no entiendo por qué se pierden con tanta frecuencia.

Ante este misterio, he considerado que puede haber una dimensión paralela habitada por duendes que vienen a llevarse nuestros calcetines cuando estos se encuentran en la lavadora.

---

¿Cuántos pares de calcetines tienes y cuántos impares hay en tu armario?

En la actualidad tengo alrededor de quince pares de calcetines. Eran más, porque en los tiempos en que la situación económica lo permitía, los compraba por docena y, hasta ahora, me quedan muchos de aquellos años y otros que he adquirido en épocas recientes. Los impares estaban almacenados en una bolsa grande, no sé cuántas piezas había. Todas se las llevó la señora que trabaja en la limpieza de nuestro edificio, solo me quedaron cinco unidades perdidas en el fondo de una gaveta.

Por casualidad mi esposa comentó que tenía esas prendas sin su respectiva compañía y ella le dijo que se las regalara. Las que estaban más nuevas, según nos contó, se las dio a su hijo y las otras las volvió trapos para el coleto.

---

¿Conoces alguna persona con Síndrome de Down? si tu respuesta es sí, cuéntanos de él.

No conozco ninguna persona con esta condición. Hace algunos años, sin embargo, cuando mi hijo era todavía un niño, en su escuela había un pequeño con Síndrome de Down. Cuando yo estaba esperando, en horas del mediodía que mi hijo saliera, él venía y me daba un abrazo, me preguntaba sobre cualquier cosa y luego se iba corriendo adonde estaba su maestra.

Recuerdo que la docente, la primera vez que el pequeño realizó esa acción, se acercó muy rápido y me dijo que estuviese tranquilo y le respondiese con el mismo cariño. Eso no era necesario, por supuesto, porque yo jamás iba a reaccionar con una mala actitud ante los encantos del niño, pero entiendo que era su deber hacerlo para evitar cualquier malentendido.

---

---

---

---

---

Invito a los amigos:
@zory23,
@mireyalongart y
@sol02

---

_{Nota: Excepto el fondo de portada, todas las imágenes pertenecen al autor y fueron tomadas con la cámara del teléfono móvil, modelo: Samsung SM-A135M.}