El regalo de estar presente

Recuerdo una vez que estaba de vacaciones con mi familia en la playa. Estábamos jugando en la arena cuando mi hijo pequeño, de 5 años, empezó a construir un castillo. Me senté a su lado para ayudarle, y empezamos a hablar de lo que íbamos a hacer con el castillo.

Mi hijo me dijo que quería que el castillo fuera tan grande que pudiera llegar al cielo. Yo le dije que eso era imposible, pero él insistió.

Así que, empezamos a construir el castillo. Trabajamos durante horas, y cuando terminó, era enorme. Estaba tan orgulloso de lo que habíamos hecho.

Cuando nos sentamos a admirar nuestro trabajo, mi hijo me dijo: "Papá, este castillo es el mejor regalo que me has dado nunca".

Aquella experiencia fue muy divertida para mí. No sólo fue agradable pasar tiempo con mi hijo, sino que también fue muy gratificante ver lo feliz que estaba con lo que habíamos hecho.

Una lección para aprender

Esta experiencia me enseñó que la presencia no siempre tiene que ser seria. También puede ser divertida y llena de alegría.

Cuando estamos presentes con los demás, les estamos diciendo que nos importan, que los escuchamos y que los queremos. Y eso es lo que realmente importa.

Consejos para estar presente

Aquí hay algunos consejos para estar presente con los demás:

Deja tus distracciones a un lado. Cuando estés con alguien, pon toda tu atención en él o ella. Apaga tu teléfono, cierra tu ordenador y deja de pensar en tus pendientes.
Escucha con atención. No sólo escuches las palabras de la otra persona, también escucha sus emociones.
Haz preguntas. Muestra interés en lo que la otra persona tiene que decir.
Expresa tu amor y apoyo. Hazle saber a la otra persona que la quieres y que estás ahí para ella.
Recuerda, el mejor regalo que puedes dar es tu presencia.